Munar la gran presidenta,
la del orgullo altanero,
quiere decirse culpable
y ahora quiere dar dinero,
lo que aún no ha precisado
es si va a devolver todo
o solamente una parte,
a su mejor acomodo.
Aquella actitud altiva
que tanto a todos nos suena
se ha tornado en caras tristes
para darnos mucha pena;
pero no nos olvidemos,
por el ánimo alterado,
de aquella gran chulería
ni de todo lo robado
Qué sensación da
que te quieran atrapar.
¡Es horrible!