Después de efectuar numerosas pruebas, algunas malogradas, para elaborar algunos de sus vinos tintos, una serie de bodegueros mallorquines eligieron uvas autóctonas para unirlas a otras de variedades foráneas, especialmente francesas. Elección que está obteniendo frutos positivos, dando vinos, muchos con buena crianza, a los que se les aprecia un ligero acento galo. En esta línea se encuentra el tinto Binigrau Negre B (Selecció) 2015. Binigrau es una bodega familiar de larga tradición enológica, ubicada en Biniali, de diseño moderno y funcional. Se trata de un tinto en donde se unen las autóctonas Manto Negro y Callet con la francesa Merlot, que después de su vinificación realizó una crianza de dieciséis meses en barricas de robre galo de primer año. Se distingue por una tonalidad tinta oscura. Se captan en nariz aromas de finas especias, incluida la canela y fruta estival isleña. Sus taninos aparecen en el paladar con personalidad, teniendo largo y buen final.
