Nuevos conceptos y experiencias están ofreciendo, tanto a nivel nacional como de Balears, una serie de vinos blancos que, incluso, sorprenden positivamente a los más apasionados amantes de los tintos. Incluso, un público joven, especialmente femenino, que se va aproximando a este mundo lleno de sorpresas en que ya se encuentran en muchas referencias elaboradas con variedades de uvas mediterráneas, atlánticas o de Balears. En este descubrimiento, que también incluye a gente madura, los blancos, en muchos casos, ven ya prolongada su vida, con ejemplos de dos y tres años, por lo que mejoran cuando han reposado como mínimo un año. Esto sucede con el Mollet de Vinyes i Vi Ca Sa Padrina 2015, bodega de Sencelles. En donde manda la variedad autóctona Prensal Blanc, con algo de Chardonnay. Ya presenta un tono amarillo acentuado. Los aromas a frutas blancas se mezclan con los de campo. Mantiene una adecuada acidez, con recuerdos florales.
Exclusiva
Prohens inauguró el agroturismo ilegal de su director de Transparencia en Andratx
La cata