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Medio ambiente

Cadena de favores (III)

Aceite mineral, neumáticos, lámparas y luminarias se reciclan si se depositan de manera selectiva en los sitios y contenedores adecuados

Los neumáticos tienen diferentes usos al final de su vida útil.

Más allá de los residuos que los ciudadanos depositan en el contenedor verde, azul o amarillo, hay otros que se generan y se recogen de manera selectiva en otras localizaciones como los puntos limpios. Aquí recogemos los tres más representativos que, aunque en menores cantidades que otras fracciones de residuos, tienen su importancia en el reciclaje por sus características.

Aceite mineral

En Balears se consumieron el pasado año 5.068 toneladas de aceites industriales, un 6,6 % más que en 2015, un volumen que representa el 1,7 % del total de lubricantes comercializados en España por las empresas fabricantes adheridas a SIGAUS. Además de ser un producto que se utiliza principalmente en los sectores de la automoción y la industria, los aceites industriales tienen presencia en otras actividades empresariales muy heterogéneas, como el transporte, la construcción, la agricultura o cualquier actividad en la que se requiera el uso de compresores, turbinas o engranajes, y donde el uso de aceites lubricantes se utiliza para refrigerar, aislar o disminuir la fricción entre las piezas de las maquinarias. En 2016, a través de la red de gestores que realizan operaciones de gestión de aceites usados en el marco del sistema se efectuaron 3.743 recogidas en 63 municipios de las islas, en los que se atendió a 1.577 establecimientos productores. En ellos se recogió una cantidad bruta de 3.082 toneladas de residuo, un volumen que contiene un cierto porcentaje de impropios (agua, lodos o partículas metálicas) y que en los centros de transferencia es analizado y sometido a un pre-tratamiento para eliminar las sustancias contaminantes y facilitar su gestión final.

En términos territoriales destacaron especialmente las operaciones de recogida en el medio rural. Del total de municipios donde se recuperó aceite usado, casi la mitad (46%) fue en espacio rural, donde se ubican el 12 % (191) de los productores totales atendidos. En estos establecimientos se efectuaron 384 recogidas a lo largo del año, que suponen el 10 % del total, con la recuperación de 258 toneladas de residuo.

Actividades productoras de residuo

Los talleres son en Balears la principal actividad generadora de aceite usado, representando el 58 % de los puntos productores atendidos, un total de 912 establecimientos. En ellos se recuperaron durante el pasado año 1.265 toneladas de aceites usados, el 41 % del volumen total recogido. Esto se debe a que se trata de un sector que destaca con claridad en esta comunidad por ser el que mayores cantidades de aceites lubricantes consume, el 57 % de la cantidad total comercializada en esta región.

La industria es la segunda actividad productora con mayor generación. Constituye el 10 % de los puntos productores atendidos, un total de 161 instalaciones en las que se recogieron 830 toneladas de aceites usados, el 27 % de la cantidad total recogida. Además de en estos dos principales sectores generadores, se atendieron 987 toneladas de aceite usado en actividades tan diversas como el transporte, hostelería, agricultura, construcción o comercio, entre otras, en suma 504 puntos productores de muy diversa índole que de forma agregada representan el 32% del total de productores.

Un residuo peligroso

Si bien es cierto que el aceite usado es un residuo de naturaleza contaminante, conserva gran parte de los hidrocarburos del lubricante original, lo que permite un alto aprovechamiento de los mismos. Tanto el proceso de regeneración del aceite usado, con el que se obtiene una base lubricante apta para la fabricación de nuevos lubricantes, como la valorización energética, que aprovecha el poder calorífico del residuo (tras una previa descontaminación), son tratamientos que permiten valorizar el aceite usado recuperado convirtiéndolo en una fuente importante de materias primas para la fabricación de nuevos productos o la obtención de energía, evitando con ello recurrir al refino del petróleo para producir aceites lubricantes y fuel óleo, respectivamente.

El aceite usado recogido durante el pasado año en Balears fue valorizado en su totalidad, cumpliendo así con el objetivo establecido por la normativa ambiental. Una vez descontados los impropios detectados en el residuo, la cantidad neta finalmente gestionada y valorizada por parte de SIGAUS fue de 2.031 toneladas. De esta cantidad neta, casi la totalidad del aceite usado se destinó a regeneración, tratamiento prioritario en la gestión de los aceites usados. En total 1.938 toneladas regeneradas (el 95,5 %) que permitieron devolver al mercado 1.291 toneladas de lubricantes, equiparable al 25 % del consumo en esta comunidad. Además este tratamiento hizo posible evitar la emisión a la atmósfera de 5.815 toneladas de CO2.

Los aceites usados que no son aptos para ser regenerados, generalmente aceites utilizados en el sector industrial que contienen una alta cantidad de otras sustancias (agua y metales) que dificultan su regeneración, se tratan para su posterior valorización energética. El producto resultante, un combustible de uso industrial de características similares al fuel óleo, se utiliza frecuentemente en industrias con hornos que deben suministrar una gran cantidad de energía, como los que suele haber en papeleras, cementeras y otras industrias de materiales de construcción (cerámicas, yeso, áridos) o en centrales térmicas de cogeneración eléctrica. Durante el pasado año, las 92 toneladas destinadas a valorización energética permitieron la generación de una energía equivalente a 1 GWh, suficientes como para abastecer el consumo anual de 234 hogares de las islas.

Lámparas

AMBILAMP, Asociación para el Reciclaje de la Iluminación, recogió durante 2016 para su reciclaje 2.626 toneladas de residuos de lámparas y 1.173 toneladas de residuos de luminarias. Estos datos suponen un ascenso con respecto a las cifras del ejercicio anterior y confirman la tendencia ascendente del reciclaje año tras año. En los tres primeros meses de 2017 AMBILAMP ha recogido ya 737 toneladas de lámparas y 308 de luminarias. Desde su fundación en 2005, la asociación ha registrado un acumulado de 21.761 toneladas de residuos de lámparas recogidas para su reciclaje. Asimismo, desde 2012, año en el que AMBILAMP comenzó a recoger residuos de luminarias, ya ha contabilizado 3.417 toneladas recicladas.

A lo largo de 2016, AMBILAMP superó la cifra de los 21 millones de unidades de lámparas: bombillas de bajo consumo, fluorescentes y LEDs retrofit. En total, y desde 2005, AMBILAMP ha gestionado la recogida y reciclaje de cerca de 160 millones de lámparas. La labor desempeñada por AMBILAMP supone importantes beneficios para el entorno natural: durante esta década ha evitado la emisión de más de 1.762.641 toneladas de CO2 a la atmósfera. Según explica David Horcajada, director de Marketing de AMBILAMP, "el mantener cada año un incremento en el volumen de residuos de lámparas y luminarias recogidos para su reciclaje es el principal reto que nos marcamos cada ejercicio y del que nos sentimos especialmente orgullosos de conseguir. Este ascenso demuestra que el modelo de recogida que hemos implantado cubre los requerimientos que nos realizan sus usuarios, tanto particulares como profesionales, y que las campañas de concienciación medioambiental sobre reciclaje que desarrollamos están aportando unos resultados muy positivos".

Por comunidades autónomas, Cataluña, con 575 toneladas, es la región donde más volumen de residuos de lámparas se ha recogido para reciclar, seguida de Madrid (401) y Andalucía (329). Las comunidades autónomas que mayor crecimiento han registrado en 2016 con respecto al ejercicio anterior han sido Balears (+30,39 %), Aragón (+19,72 %) y Valencia (+14,33 %).

En el caso de los residuos de luminarias, son las mismas tres comunidades autónomas las que lideran el ranking, pero variando el orden: Madrid, con 206 toneladas es la región donde mayor volumen se ha recogido, seguida de Andalucía (180 toneladas) y Cataluña (159 toneladas). En cuanto a un incremento porcentual, las comunidades autónomas de Extremadura (+845,74 %), Cantabria (+ 360,69 %) y Región de Murcia (+ 216,62 %) son las que presentan un ascenso más significativo.

En palabras de David Horcajada, "las diferencias entre comunidades autónomas siguen existiendo, aunque cada vez aumentamos más las recogidas en todas las regiones. Este año, esperamos suavizar las diferencias y conseguir un aumento significativo en aquellas zonas en las que menos se recoge. Para ello vamos a llevar a cabo durante este año un esfuerzo en la ampliación de nuestra red de recogida tal y como, además, se nos pide desde el nuevo Real Decreto".

Neumáticos

La entidad sin ánimo de lucro SIGNUS realizó durante el pasado ejercicio diversas acciones relacionadas con su compromiso con la economía circular en colaboración con empresas privadas, universidades y centros tecnológicos. Desde SIGNUS se han impulsado diferentes proyectos para dar valor a los materiales reciclados procedentes de la recogida de neumáticos destacando el desarrollo de piezas de granulado de caucho y resina mediante sistemas de producción en continuo, la aplicación de la nanotecnología a las partículas de caucho, incorporación de partículas de caucho en el hormigón de las barreras New Jersey, desarrollo de superficies de altas prestaciones con caucho para pistas ecuestres, entre otros.

La cantidad total de neumáticos fuera de uso gestionada en 2016 por SIGNUS fue de 194.803 toneladas, de las cuales 23.629 toneladas se destinaron a preparación para su reutilización (neumático de ocasión o recauchutado), 102.522 se separaron en sus componentes (acero, caucho y fibra textil), 144 toneladas se destinaron a obra civil, 66.048 se utilizaron en el coproceso de fabricación de cemento, 2.432 toneladas para la generación de energía eléctrica y 22 toneladas a instalaciones de pirólisis.

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