Mariano Rajoy, el Grande,
por todos tan admirado,
cada vez que abre la boca
nos deja desconcertados;
Cuando toma la palabra
esperas sus idioteces,
sumiéndote en la desdicha,
si no escuchas sus sandeces.
No puede haber tontería
en personas tan egregia
la única explicación
es que sea una estrategia;
que sin hacer nunca nada
pronto cumplirá un bienio,
nos distrae con sus chorradas
nos distrae porque es un genio
Qué sensación da
que te quieran atrapar.
¡Es horrible!