¡Qué no habrán visto estas paredes! ¡Cuántas historias en las escaleras, portales y habitaciones! ¡Cuánta vida en su interior y cuánta vida espiada desde las ventanas y balcones! Un edificio no es sólo un edificio pues, a lo largo del tiempo se convierte "en testimonio y parte del paisaje emocional de una ciudad". Y así, como si hubiera estado ahí siempre, el 1916 llega a los cien años. Se dice (y escribe) rápido. Pero su existencia está llena de poesía, de novela, de música... Quién le iba a decir al señor Segura cuando encargó al arquitecto Gaspar Bennàssar i Morell la construcción de este edificio que en torno a él se crearía un universo de emociones. Y es que la arquitectura tiene ese poder: es capaz de enlazar a las personas y al tiempo.
Cien años bien merecen una celebración y para la familia Isern, propietaria del Edificio 1916 desde la Guerra Civil Española, mucho más. De ahí el detalle, el mimo con el que quisieron sorprender a amigos y clientes del Café 1916. Un evento realmente estudiado que resultó divertido, didáctica y, musicalmente hablando, todo un acierto.
Las hermanas Fernanda, Cristina y Ketty Isern estaban radiantes para la gran noche. Junto a Damián Planas y David Romero, entre otros, ejercieron de perfectos anfitriones. Como "portero" del edificio, a pie de escalera, el presentador y guionista Joan Miquel Artigues. Él fue el encargado de guiar al más de centenar de asistentes por los recovecos de la construcción y por sus secretos. ¡Y qué mejor un desfile repasando las tendencias de los últimos cien años para entender nuestro mundo!
fotografías de una década
Así que viajamos a los años 20, a ritmo de Charleston Enoch Light, con Juan Miquel Pericás y Marilen Juan Bonet; a los años 30, con la Guerra Civil haciendo estragos y a la década de los 40, los años del hambre. Fue en 1936 cuando Andreu Isern Vidal adquirió el edificio. De hecho, en los bajos estaban las oficinas de Andrés, el Bar Cristal y el colmado Espanya, hoy, el Café 1916. Hoy, los 36 miembros de la familia continúan viviendo en él.
En los 50, el Fly me to the moon de Sinatra nos transportó a unas pistas de baile con faldas de vuelo y mucha extravagancia. Así lo lucieron -y muy bien- Xavi Fiol, Carlos Fiol y Carlota Romero, todos vestidos por Ana´s Room y Drop. En los 60, el primer boom turístico. Mallorca pasó de tener 600.000 visitantes a casi 7 millones en 1973. Estampados, mundo hippy y ropa original y divertida. Tan bien como se lo pasaron Cati, Eli y Jaume con diseños de Sunvibes y Drop. Ahí sí que bailamos todos con el Dancing Queen de Abba.
La muerte de Franco, la llegada del Estatut d`Autonomia de Balear... en los años 80 respiramos democracia, feminismo y movimientos ecologistas. Nos llegaron los looks urbanos, atrevidos, llenos de colores. Libertad que permitió al Café 1916 abrir todos los domingos, el primer bar que lo hizo en Palma. Después vendrían tantos otros... Soraya, Xisca, Laura y Tonia se pusieron las faldas y a lo loco que cantaba Cyndi Lauper su Girls just want to have fun.
Joan Miquel Artigues desveló quienes se esconden tras cada una de las paredes del 1916. Recordó a los Bonnín, a la viuda de Mascaró, a los González, los Canudas... y un largo etcétera de protagonistas. Como Maria Antònia Sans, Xisco Bestard y María José Roca, que nos contó que para ella, el 1916 era el edificio donde había vivido con sus amigos, la familia Isern, todos los acontecimientos importantes de la vida: bodas, bautizos, comuniones... "Es nuestra memoria", dijo emocionada.
También vimos a las guapas amigas Pilar Arbona y Nuria Lucas, a Xisca Pizá, Pilar Terrassa, Magdalena Frau, Rocío Palomero y Concepció -Ció- Marqués y a las parejas Guillem Mudoy, Sarah Lambourne, Margalida Rotger y José Luis Roses. Todos disfrutaron al ritmo de la música de la banda Frit Style y del catering servido por Turquesa.
Pasarela en la Gerhardt Braun
Cuenta Ela Fidalgo que sus sentimientos "más interiores" están todos expuestos en su Work in progress. "Es un reflejo de mi mundo interior, creaciones que iban surgiendo mientras las construía". Se desnuda sin más. Sin vergüenzas. Y se entiende. Porque a esta mallorquina no la va a detener nadie. Se presentó en la última edición de la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid (la antigua pasarela Cibeles) y se vino con el codiciado título de Mejor Diseñadora Joven. Así que la galeria Gerhardt Braun le abrió sus puertas, el patio y lo que hiciera falta, a juzgar por el entusiasmo mostrado por Mercedes Estarellas, la directora, para que exhibiera la colección valedora de ese Ego. A modo de esculturas, se exhibieron diseños a base de materiales reciclados donde claramente se ve la experimentación y el error en tejidos, formas y patrones. Todo buscado, todo ansiado.
Y por si fuera poco, o no hubiera revolucionado lo suficiente, mostró su último proyecto, Ready Made. 10 piezas inéditas que vimos en maniquíes que recorrieron todos los diferentes espacios de la galería. Entre el público, vimos a Bárbara Galmés, Cristina Muñoz de Pinko o a otros diseñadores, como Alberto Tous y Margarita Payeras.
Arquitectura y moda, de nuevo de la mano. Porque en este Ready Made hay una clara inspiración en lo que el arte supne para los diseñadores de moda, gráficos, interioristas e industriales. "Los artistas son visionarios que reflejan la realidad que está por llegar". Y Ela se impregna de todo lo que hay en su entorno. No para. Por eso, tras Work in Progress y Ready Made vendrá la última parte de una trilogía de moda. Nos gustó mucho la palabra que usó para definirse. "Soy como una matrioska, me voy construyendo poco a poco". Por cierto, y a resaltar, el maquillaje realizado por Nuk y la peluquería de Elite Look.
No se quisieron perder este desfile en la Gerhatdt Braun Gallery el subdirector de Titos Xavi Manera, que estuvo acompañado por Vanessa Capó, Aina Huguet y Lluís Pérez, la organizadora de eventos Mercedes Fernández, la editora de Lux, Alicia Polo y la directora de Marketing de Cap Rocat, María Navalón.
Solidaridad se pinta en rosa
Durante toda esta semana hemos vivido diferentes eventos solidarios con el lazito rosa como protagonista. Carreras y mercadillos benéficos donde se recaudan fondos para la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). Uno de las propuestas que más gusta y mejor aceptación tienen es la que organiza el GPRO Valparaíso Palace Hotel & Spa. El pasado sábado 22 decidió inundar todo su restaurante del color de rosa y ofreció un brunch solidario tanto para húespedes como para clientes eventuales. 20 euros para disfrutar de la mejor gastronomía de la mano del jefe de cocina del establecimiento, Carlos Botella, con la satisfacción, además, de que buena parte de lo recaudado iría a parar a manos de la delegación de Balears de la AECC.
Con el enganche de un show-cooking de pa amb oli donde la sobrassada de Mallorca, las setas y la carne fueron protagonistas, decenas de grupos de amigos compartieron una mañana diferente.
Fueron recibidos por el director y subdirector general del Valparaíso, Antonio Ferrer y Allen Chen, y por las trabajadoras sociales de la asociación, Yanina Paglioni y Caterina Puigrós. Bolsas, paraguas, libretas... Cualquier artículo que se adquiriera ayudaba un poco a las mujeres que sufren cáncer de mama. Así lo hacían saber también las responsables del cliente y relaciones públicas Mariló del Vaye y Natsha Eschke.
No quiso faltar a la cita Carmen Planas, presidenta de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Baleares (CAEB) y el doctor Javier Cortés. Compartieron mesa, entre otros, con Isabel Got, Rosa María Martín, Bárbara Pou y la directora del Institut Balear de la Dona, Rosa Cursach. A unos pocos metros, y en otra mesa, Gema Muñoz junto a su marido, Antelm Pujol, y la bloguera gastronómica Ana Méndez junto a Javier Vidal.
Fieles a este brunch solidario, María Rosa Llodrá, Jerónimo Sainz, María Ángeles Montaner, Cati March, Juana March y Pepi Mestre. Otro grupo numeroso y solidario, el formado por Tomás Vera, Amada Salva, Pilar Llompart, Pedro Ladaria, Ángela Escandell, Javi Negre y María del Mar Sabater. Además, hemos de decir que los huéspedes del hotel recibieron este brunch con muy buena sintonía y también aportaron su granito de arena con pequeñas donaciones.
Un ´shower toilet´ exclusivo
Sin duda, la propuesta de Socias y Rosselló de presentar lo último en cuanto a tecnología y diseños de inodoros llamaba la atención. Y lo hizo tanto que hasta las instalaciones centrales de la empresa mallorquina se desplazaron medio centenar de prestigiosos arquitectos así como amigos y clientes habituales de la firma.
Víctor Leite, director de proyectos de Grohe España y Pere Ferrater, arquitecto del equipo de dirección de Obras, Proyectos y Decoración del Grupo Iberostar, fueron los encargados de asombrarnos con el nuevo concepto de higiene personal quepropone el nuevo Sensia Arena: "un innovador shower toilet de diseño minimalista que une tecnología alemana con la cultura japonesa del spa".
Sí, muchos nos preguntamos a qué se referían. Y lo explicaron. Un inodoro antibacterias, con temperatura ajustable, limpiador, absorción de olores, secador regulable y -lo que más gustó-, luz nocturna que guía en la oscuridad y apertura automática de la tapa. Todo, por unos 1.200 euros. Un detalle de lujo que se convertirá en un referente de las casas más exclusivas y que presenciaron en directo, por ejemplo, los arquitectos Giuseppe Violante y Jaime Gracia-Ruiz, que estuvieron acompañados por Nuria Amat, o Mariana Chacón, Tolo Arróm, Coro Moreno, Yolanda Cabo y Patrick Popp, entre otros.
Muy atentos, además, vimos a todo el equipo de Grohe, David Fernández, Magdalena Bernabé, Pere Ferrarter y Clara Solá.
Y así, entre esos pequeños detalles exclusivos, se nos acabó un mes de octubre -Halloween mediante y del que daremos buena cuenta de sus fiestas en el próximo número- que ha sido de lo más variado y que nos augura a pensar que el noviembre que está por venir nos ofrecerá más oportunidades para brindar.
