Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Cuéntenos su viaje

Quince cosas que solo se pueden hacer con la Roja en Francia (II)

Vista del frente marítimo de la ciudad de Niza.

España juega la primera fase de la Eurocopa en tres de las ciudades más bellas del sur de Francia: Toulouse, Niza y Burdeos. El segundo partido se disputó en Niza. Esta es una selección de lo imprescindible que hay que ver y disfrutar en esta ciudad.

Niza, disputada por el mar y la montaña

La capital de la Costa Azul es una de las regiones turísticas más apreciadas del mundo, y el segundo destino más popular de Francia después de París. La ciudad de Niza es reconocida por su suave clima y su entorno espectacular dada su situación entre la costa mediterránea y las montañas del norte. Sus atractivos son incomparables y múltiples: un extraordinario emplazamiento geográfico entre el mar Mediterráneo y las montañas, a tan sólo unos kilómetros de la frontera italiana, la suavidad legendaria de su clina, su luminosidad excepcional, la diversidad de sus paisajes, sus playas de hermosos tonos azulados... Ciudad de historia, de cultura, de arte, de creación, de eventos, de ocio, de naturaleza, de sabores, con un agradable estilo de vida... Niza cultiva el encanto de su diferencia proponiendo innumerables visitas y actividades. Estas son algunas:

-Descubrir la imagen de marca más conocida de Niza en todo el mundo, el Paseo de los Ingleses y sus siete kilómetros de playas, lugar de cita de aficionados al footing, ciclistas y paseantes. Y también junto al mar, el Muelle de los Estados Unidos y el barrio del Puerto, lleno de animación, que cuenta con la mayor concentración de anticuarios de Francia. Y a propósito de mar vale la pena hacer un paseo en barco en uno de los santuarios de mamíferos marinos que cubre la zona de mayor densidad del Mediterráneo occidental con al menos 2.000 ballenas y 25.000 delfines.

-Recorrer la ciudad vieja con sus callejuelas típicas y sus "piazzettas" que esconden muchos tesoros, sus callejuelas estrechas y llenas de animación, su historia, sus iglesias barrocas y sus mercados llenos de colorido... Subir a la Colina del Castillo, desde donde se disfrutan de unas vistas excepcionales de la Bahía de los Ángeles, los tejados de la ciudad vieja y los Prealpes del Sur. Para toda la estancia en Niza, el French Riviera Pass es un verdadero salvoconducto que ofrece numerosas ventajas.

-Aunque Niza se asocia a vacaciones y disfrute de la vida, su oferta cultural es impresionante. Vale la pena conocer algunos de su veintena de destacados museos y galerías, destacando varios impresionistas o también de la célebre Escuela de Niza. Algunas recomendaciones: el Museo Matisse, el Museo Chagall, el MAMAC (Museo de Arte Moderno y de Arte Contemporáneo), el Museo de Artes Asiáticas...

-Subir los 214 escalones sin quedarse sin aliento para alcanzar la cima de la Colina del Castillo. Los esfuerzos se verán recompensados por unas vistas fascinantes de la Baie des Anges y del conjunto de la ciudad y el camino al castillo en sí es ya una delicia. Las ruinas del castillo están situadas en unos hermosos jardines que están en segundo lugar entre los más bellos de Francia, por detrás del Jardin du Luxembourg de París y por delante del Parc de la Tête-d'or de Lyon. Aunque para tener aún mejores vistas, hay que animarse a levantar el vuelo por encima del Mediterráneo utilizando un paracaídas ascensional. ¡Vistas excepcionales de la ciudad y sensaciones fuertes garantizadas!

-Disfrutar la "Cocina nizarda" que ofrecen los restauradores que se comprometen con el respeto de las recetas, la calidad de los productos y materias primas utilizadas, la calidad de acogida y la información de la clientela. La ciudad ofrece una cocina tradicional y mediterránea, una fusión histórica de cocina mediterránea francesa e italiana, con muchas verduras, sabores y olores... Entre los platos típicos están la célebre pissaladière, una especie de pizza sobre una masa de hojaldre y elaborada con anchoas, tomate triturado, cebolla, huevo y aceitunas, las salsas à la niçoise, que tienen el tomate y las olivas negras como ingredientes estrellas y por supuesto, la conocida ratatouille y el pan bagnat.

Compartir el artículo

stats