—¿Qué tal, doña Roselyne?
—Pues muy ocupada, la verdad…
—¿Y eso?
—Estoy revisando los saldos de mis cuentas corrientes para ver si le podré pagar a Nadal la querella que me ha puesto…
—Bah, una exministra de Francia no debe tener nada que temer…
—Pues no se crea. Que estás de tertuliana y se te calienta la boca…
—¿Cómo fue el asunto?
—Pues nada, que en el programa de televisión donde voy de tertuliana me llegaba el turno de hablar y no sabía qué decir…
—Y la lió…
—Bueno, son los riesgos del directo. Es tu turno, y tienes que hacer ruido con la boca. El contenido es lo de menos.
—¿Es lo de menos?
—Efectivamente. Es como un consejo de ministros de Sarkozy, sólo que en los consejos de ministros de Sarkozy éramos muchos más para decir tonterías.
—En resumen; que en el programa dijo usted lo primero que se le pasó por la cabeza…
—En realidad no. Lo que dije ni siquiera pasó antes por mi cabeza. Simplemente era mi turno y, como le dije antes, tenía que hacer ruido en francés con la boca.
—¿Pero por qué, precisamente, se metió con Nadal?
—Se lo merece. Ese chico cometió un grave error y lo tiene que pagar.
—¿Qué error ha cometido?
—No nacer en Francia. Si ganas nueve veces Roland Garros, una de dos, o eres francés o seguro que te estás dopando.
—Pero lo que está usted diciendo es una memez…
—Sí, es que no paro.
—Mucha gente se pregunta cómo es posible que una doctora en Farmacia que ha sido ministra de Francia sea capaz de hacer acusaciones que no están contrastadas…
—Como si ser doctora en Farmacia o ministra de Francia fuera garantía de algo…
—Toni Nadal se calentó y dijo que es usted imbécil…
—Eso me hace sospechar que él no lo es.
—Debo confesarle que, personalmente, opino lo mismo que Toni Nadal…
—Pero usted es médico, y sé que es un diagnóstico, no un insulto.
—¿Qué pasará si Nadal gana su décimo Roland Garros dentro de unas semanas?
—No hago más que rezar a Juana de Arco y a la Virgen de Lourdes para que eso no ocurra.
—Alguna ONG francesa estará feliz con sus bobadas…
—¿Lo ve? Era una mentira con contenido social.
