Diario de Mallorca

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La casa

Un bar de pueblo

Una reforma diseñada y ejecutada por el interiorista Felip Polar y la decoradora Laura Lerycke renueva la imagen, sin perder su identidad, de este local de sa Pobla

Que sería de los pueblos sin los bares de toda la vida, aquellos que han marcado y si no acompañado los tiempos más importantes de los habitantes y visitantes que son los que los han convertido en referente, en una institución. Casa Miss es uno de los bares de tapas más emblemáticos de Sa Pobla. De todos quizás sea el que cuenta con una historia más rica y ligada a la evolución de este lugar tan ligado a la tierra, a Mallorca y a las tradiciones del campo pero también, en su momento a la industria emergente de turismo y el desarrollo de zonas cercanas como Alcúdia , Can Picafort o las Playas de Muro. Ser de Sa Pobla marca y en Ca sa Miss se nota la diferencia. El bar que hoy les mostramos está en el epicentro de la vida social y cultural de la población. Situado en la Plaça Major ofrece desde 1967, ni más ni menos, el ambiente clásico e infalible de bar de tapas y copas en un ambiente cálido y familiar porque una sola familia ha sido su propietaria. La familia Mir está al frente de la dirección desde sus inicios por lo que ofrecen a sus clientes una versión auténtica del ambiente de bar de tapas que tanto se anhela recuperar en los últimos tiempos en el ámbito de la hostelería y que tanto hemos visto imitar con éxito en los últimos tiempos. Por eso la intervención que hoy les mostramos es de suma importancia. Sin descuidar su pasado ni su tradición Casa Miss ofrece este 2016 su versión mejorada tras una reforma diseñada y ejecutada por el interiorista Felip Polar y la diseñadora y decoradora Laura Lerycke. El principal objetivo para los diseñadores ha sido conservar la esencia del local, del lugar y de su gente. El local necesitaba renovar su imagen sin perder su identidad.

La intervención se centró en reconstruir el techo creando una estructura de madera lacada en blanco formando una cuadrícula de espejos. Este recurso permite a los diseñadores dimensionar el espacio y hacer un juego visual de reflejos. Un foseado perimetral del techo permite bañar las paredes de luz. El tipo de iluminación ha sido clave para lograr el estilo y conservar la calidez. Los diseñadores han respetado al máximo la fachada logrando ser fieles a la imagen de Casa Miss. Una correcta utilización de la luz de la rotulación enmarca la nueva imagen . La recuperación de los colores originales del local han sido claves en la decoración y el mobiliario, todo ello reforzado con el dorado que ha convertido la barra en el corazón y joya del proyecto. Toda la decoración está cuidada al más mínimo detalle. Así desde los baños al uniforme de los camareros se han cuidado en extremo, siguiendo la máxima del buen servicio de toda la vida. El resultado ha devenido en un ambiente cálido con una mezcla perfecta entre lo boho, lo vintage y lo teatral, y han convertido el local en visita obligada para los amantes de las buenas tapas mallorquinas, los vermuteros y los pinchos caseros. De toda la vida.

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