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Tribuna

La gestión de los residuos: un reto inaplazable

Durante los últimos años se ha trabajado mucho por parte de los diferentes equipos municipales del Ayuntamiento de Palma en aumentar la recogida selectiva obteniendo hasta ahora buenos resultados. En 2014 se recogieron 1.000 toneladas más de vidrio de las que se recogían en 2010. En cuanto a los envases, en ese mismo periodo el aumento es de 700 toneladas. La recogida de papel y cartón ha disminuido aunque parece debida a un menor consumo.

La principal labor de colaboración que debemos llevar a cabo los ciudadanos es la de separar los residuos en los hogares y depositarlos en los lugares que la administración ha previsto para efectuar la recogida. Queda aún mucho trabajo por hacer para aumentar en el municipio de Palma, los porcentajes de recogida selectiva actual.

Sin duda, la necesaria sustitución del sistema de recogida neumática del centro es una buena oportunidad para proponer un nuevo sistema más eficiente, más cómodo para los ciudadanos y, que a su vez, favorezca un mayor reciclaje. El proceso participativo abierto por el actual equipo de gobierno nos parece positivo porque no cabe duda de que, para que el nuevo sistema funcione, se deberá implicar al mayor número de colectivos. Sin embargo, creemos que la participación de los vecinos debería haber sido mucho mayor puesto que ellos serán los verdaderos pilares del éxito del nuevo sistema. Solo cuando la administración sabe adaptarse a las necesidades del ciudadano surge la verdadera colaboración que es la clave del éxito.

Para poder alcanzar los objetivos fijados, resulta muy importante la participación de todas las administraciones públicas y de diferentes entidades, pero resulta básica la colaboración de los ciudadanos en general, ya que no se concibe una adecuada gestión de los residuos urbanos sin la efectiva participación de los vecinos en todas las políticas que se diseñen.

Por otra parte, desde el Partido Popular nos parece totalmente innecesario el contrato de 16.000 euros efectuado a una consultora para este tema puesto que la solución de la recogida móvil era una propuesta que ya se había hecho por los propios técnicos de EMAYA y por la que ya se había interesado el anterior equipo de gobierno como sistema alternativo para el centro de Palma.

Creemos que es un sistema que puede ser adecuado por las ventajas que supone a la hora de minimizar la presencia de los contenedores durante el día evitando su impacto estético negativo, por la posibilidad de poner puntos de recogida selectiva más accesibles y por utilizar vehículos silenciosos que evitarán molestias a los ciudadanos. Eso sí, se debe buscar desde el primer momento la complicidad de los vecinos, restauradores y comerciantes puesto que, sin ese consenso, sin duda será un fracaso. Consideramos fundamental la participación y la implicación de todos ellos en cualquier decisión que se tome. Para ello proponemos acciones orientadas a la información a los ciudadanos y consumidores en relación a la recogida separada.

Para aumentar el porcentaje de reciclado es fundamental animar a la población a hacer un esfuerzo ambiental importante, pero al mismo tiempo reconocerle este esfuerzo en forma de una gestión muy correcta de sus residuos y, por lo tanto, revirtiendo directamente sobre el ciudadano el mérito de una labor bien realizada. De tal forma que, a los vecinos que son respetuosos con el medio ambiente también se les pueda trasladar los menores costes de tratamiento que tienen estas fracciones.

Debemos apostar por mejorar la calidad del entorno urbano, reduciendo la presencia de contenedores y residuos en las calles y áreas históricas o monumentales y apostando por vehículos más silenciosos y menos contaminantes en la línea del Plan municipal de eficiencia energética diseñado por los técnicos de EMAYA e impulsado por el equipo de gobierno la pasada legislatura, haciendo que la ciudad de Palma de Mallorca sea un lugar de vida, trabajo e inversión más atractivo y saludable para todos.

Es una realidad incuestionable que la sociedad actual genera una gran cantidad de residuos debido fundamentalmente al modelo de producción y consumo implantado en occidente, modelo que contribuye a la degradación progresiva del medio ambiente

La Unión Europea siempre se ha mostrado muy sensible en relación con la gestión de residuos sólidos urbanos. La Estrategia 2020 puesta en marcha tiene como objetivo convertir a Europa en una sociedad eficiente en el uso de los recursos que produzca menos residuos y que utilice como recurso, siempre que sea posible, los que no pueden ser evitados, avanzando así hacia la "Sociedad del Reciclado", que menciona la Directiva 2008/98/CE de 19 de noviembre de 2008, sobre los residuos. La trasposición de esta Directiva a nuestro ordenamiento jurídico interno se lleva a cabo a través de la Ley 22/2011, de 28 de julio, de residuos y suelos contaminados que sustituye a la Ley 10/1998, de 21 de abril de Residuos.

El objetivo es minimizar los impactos de los residuos generados tomando decisiones en la concepción y fabricación de los productos. Es la forma más eficiente de evitar los daños al medio ambiente ocasionados por la generación y la gestión de los residuos. Sin duda alguna, el mejor residuo es el que no se genera.

* Regidora del Grupo Municipal del Partido Popular en el Ayuntamiento de Palma

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