Los taxis amarillos son un valor a la baja. El que fuera uno de los mejores negocios de Nueva York ha perdido su atractivo. Los medallones de los taxis amarillos ofrecen la licencia para transportar pasajeros en toda la ciudad de Nueva York. En los últimos años han visto como su valor se ha reducido debido a los cambios tecnológicos y también por la incorporación de los nuevos taxis verdes, que solo pueden recoger pasajeros en Harlem, Brooklyn, el Bronx y Queens.
Los medallones de los taxis amarillos se vendían por una simple cuota de renovación de 10 dólares durante la década de 1930. Ahora cuestan cientos de miles de dólares. En el año 2011 se llegó a una cifra récord de la venta de un medallón por más de un millón de dólares.
Los taxis amarillos siguen liderando el mercado con una gran diferencia sobre su inmediata competencia, pero su futuro no es tan halagüeño como se presentaba hace sólo una década. La apuesta de los taxis amarillos fue demasiado fuerte. Apostaron por Manhattan, pensando que en los otros condados nunca habría demanda. La realidad les ha demostrado su equivocación. Brooklyn es ahora un lugar tan deseable como Manhattan y muchos de sus residentes tienen un poder adquisitivo tan elevado como el de sus vecinos de condado.
Hasta hace muy poco, era difícil encontrar un taxi en Manhattan que quisiera transportar a un cliente a un barrio lejano de Brooklyn, aunque estaban obligados por la ley. La respuesta era negativa o en caso de ser positiva, estaba garantizada un actitud hostil durante parte del viaje. El motivo argumentado era que con casi toda seguridad deberían realizar el viaje de regreso a Manhattan de vacío.
Ante los cambios sociales y económicos de la ciudad, para paliar esta situación, el ayuntamiento de Nueva York decidió crear los taxis verdes. Pueden recogen clientes en toda la ciudad, excepto en Manhattan, desde Downtown hasta la calle 125, en Harlem. Los taxis verdes tienen taxímetro como los amarillos y son generalmente más nuevos y espaciosos, adaptados a la demanda actual.
Uber lidera la otra competencia, que no está limitada a esta compañía ya que existen otras aplicaciones de teléfono móvil similares. El número de vehículos registrados en Uber ya ha superado los amarillos. Según las cifras oficiales, en la ciudad hay 13.587 taxis amarillos y la última cifra ofrecida por Uber ya se acercaba a los 15.000.
Pero las cifras no son malas para los taxis amarillos, que realizan casi 500.000 viajes al día, una cifra muy superior a los 30.000 de Uber. La preocupación de los dueños de medallones de taxis amarillos no es por las cifras actuales, sino porque la tendencia es favorable a las alternativas. El monopolio que existió durante años, que perjudicaba claramente a los usuarios, ha desaparecido en parte por la incorporación de los taxis verdes, promovidos por la ciudad y por Uber y otras aplicaciones, de creación totalmente privada. Nueva York es menos amarilla en detrimento del verde y el negro.
