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La casa/ Arquitectura

Quitando máscaras

Una renovación en un Ático de palma para adaptarlo a nuevos gustos, más vanguardistas, y a nuevas necesidades, más actuales.

Hoy les mostramos un ejercicio de interiorismo, en realidad les enseñamos los resultados definitivos de una intervención arquitectónica atrevida, que podemos denominar moderna en el mas amplio sentido de la palabra ejecutada en un piso de obra convencional que el arquitecto Pedro Cerón Siles, de Silestura arquitectura quiso modificar para adaptarlo a nuevos gustos, más vanguardistas, y a nuevas necesidades, más actuales.

La vivienda se sitúa en la zona de Son Dameto, en la zona de la Policlínica Miramar, un barrio residencial bien conectado con el centro de la ciudad de Palma y con fáciles accesos desde el extrarradio, y también, buenas salidas de la zona urbana. Se trata de un ático en una cuarta planta de 145 metros cuadrados que originalmente contaba con cuatro habitaciones, dos baños, un salón, una zona de comedor, una cocina tradicional con coladuría y un gran solárium que ocupa toda la planta superior de la vivienda y que se hace accesible a través de una escalera de caracol.

El condicionante de valor por el que se adquirió la vivienda es la gran cantidad de luz natural que incide durante todo el día sobre todas las estancias, la sensación de amplitud visual en las vistas a pesar de estar en una zona residencial de bloques de viviendas y la agradable corriente de aire que se percibe en cualquier punto gracias a las pequeñas terrazas de cada una de las estancias que permiten que el aire circule libremente por toda la casa.

Partiendo de un diseño de una vivienda tradicional, distribuida por largos y oscuros pasillos se proyectó una vivienda totalmente permeable a la vista. El hall de acceso se incorpora y delimita a la vez a través de una gran columna de vidrio negro con iluminación indirecta que define ese punto como el eje de distribución de las zonas comunes. Con ella y su reflejo se consiguió dar amplitud y orden a todo este espacio abierto. Alrededor de ella se ensambla el salón, el comedor y cocina. Unificando las estancias diurnas se consiguió también darles privacidad a las zonas nocturnas. Analizando las necesidades de la propiedad, y dotando a la vivienda de dos habitaciones completas de las cuatro iniciales, se diseñó una habitación principal incorporando totalmente el baño y el vestidor a través de paneles de vidrio y maderas marinas consiguiendo así un espacio privado amplio y funcional.

Se proyectó todo el conjunto haciendo uso de materiales tan distintos como son el vidrio templado negro, el aluminio y detalles en maderas nobles obteniendo curiosamente una total armonía pese a las diferencias tan notables de texturas y brillos o transparencias que van ejerciendo su poder estético en cada una de las diferentes estancias. Para los solados se unificó todo el conjunto de la vivienda con un microcemento gris claro mate que potencia la amplitud y da continuidad de todas las estancias.

Como detalles que destacan en la vivienda por su diseño hay que hacer notar que se intentó desenmascarar la estructura de la vivienda desvistiendo los pilares y dejando a cara vista el hormigón con el que está construido dándole así un carácter más industrial y original a un edificio de concepto conservador. La cocina se proyectó en isla con campana integrada en techo y encimera compacta de Corian. Con el fin de unificar la cocina con el salón se diseñó un frontal de muebles de suelo a techo sin tiradores con el fin de integrarla por completo y ocultando en dos de sus módulos la puerta de acceso a la coladuría y que de esta manera pasa totalmente desapercibida.

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