La hija de Ana Julia Quezada, autora confesa de la muerte violenta del niño de ocho años Gabriel Cruz en Níjar (Almería) declaró ayer en calidad de testigo ante el titular del Juzgado de Instrucción número 5, Rafael Soriano.

Estaba previsto que la joven, residente en Burgos, compareciera en sede judicial después de que el magistrado que investiga a su madre, de 43 años, por presuntos delitos de asesinato, detención ilegal y contra la integridad moral rechazase tomarle declaración, tal y como solicitó, por videoconferencia.

Según trascendió tras la detención de Ana Julia en la Puebla de Vícar el pasado 11 de marzo cuando transportaba el cuerpo sin vida del pequeño en el maletero de su coche, la hija, de 24 años, sufrió una crisis de ansiedad por la que precisó atención hospitalaria.

Por otro lado, la Asociación Andaluza de Estudios Penales, con sede en Granada, ha retirado su personación como acusación popular en la causa penal contra Quezada por la muerte violenta del niño, si bien se mantiene como parte la asociación Clara Campoamor.

El juez instructor Rafael Soriano aceptó la personación de ambas entidades al entender que que concurría "interés en la defensa del menor".