La Policía Nacional ha detenido a tres personas como presuntos miembros de una organización criminal que habría obligado a una mujer colombiana a practicar la prostitución en Palma, con amenazas de hacerle daño a ella y a su familia en su país. Convencieron a la víctima para que viajara a España con una falta oferta de empleo como trabajadora del hogar y una vez en Mallorca le arrebataron su pasaporte y la explotaron sexualmente, hasta que logró escapar y denunciarles.

Según informaron fuentes policiales, la investigación del caso comenzó este mes, a raíz de la denuncia que la víctima presentó en Granada. La mujer, de nacionalidad colombiana, relató que había sido convencida en su país por un hombre, que le ofreció un puesto de trabajo en Mallorca como empleada del hogar.

Ella aceptó la oferta y la organización se encargó de todos los trámites burocráticos para viajar a España. Le facilitaron documentación y dinero para acreditar medios de vida suficientes para su estancia en el país.

Sin embargo, en cuanto llegó a Mallorca le arrebataron tanto el dinero como el pasaporte y le dijeron que había contraído una elevada deuda con la banda, que debería saldar ejerciendo la prostitución. En caso de negarse, le dijeron que su familia, que había dejado en su país, sufriría las consecuencias y que podían contratar a sicarios para que les hicieran daño.

La víctima, sin medios de vida y sin ningún conocido en España, se vio obligada a dejarse hacer fotos desnuda para ser publicadas en anuncios de sexo por dinero, y a practicar la prostitución en Palma. Según manifestó la denunciante, durante un tiempo estuvo controlada en todo momento por dos miembros de la banda y fue obligada a estar disponible para practicar la prostitución durante 24 horas al día. A cambio recibía una cantidad ínfima de los ingresos que generaba, ya que el grueso del dinero iba en teoría a saldar la deuda que había contraído, una deuda que no menguaba con el paso del tiempo.

Denuncia en Granada

La mujer finalmente logró escapar durante un descuido de sus proxenetas y huir a Granada, donde presentó una denuncia ante la Policía Nacional.

La Unidad Contra Redes de Inmigración y Falsificación (UCRIF) de la Policía Nacional de Palma, en colaboración con la Jefatura Superior de Andalucía Oriental, abrió una investigación, denominada "operación Medellín", que condujo a la detención de tres presuntos proxenetas, dos hombres y una mujer, miembros de la misma familia. Al parecer los tres forman parte de un grupo organizado con diferentes ramificaciones en España, que se dedica a explotar sexualmente a mujeres traídas ex profeso desde Colombia. Uno de ellos, residente en Tenerife, era el responsable de captar a las víctimas en su país de origen, mientras que los otros dos se encargaban de custodiar a las víctimas y explotarlas en Palma.

El primero de ellos ya fue detenido por hechos similares a finales de año por agentes de la UCRIF de Tenerife, en una operación en el que fueron liberadas siete mujeres que eran obligadas a prostituirse.

Esta operación se engloba dentro del Plan de la Policía Nacional contra la Trata de Seres Humanos, puesto en marcha en 2013 con la creación de la Brigada Central contra la Trata de Personas. Para este fin la Policía activó la línea telefónica 900.105090 y el correo 900.105090trata@policia.es, para facilitar la colaboración ciudadana y las denuncias anónimas y confidenciales de este tipo de delitos