Una joven aceptó ayer dos años de prisión por amputar parte de un dedo a otra durante una riña en el paseo Marítimo de Palma. La acusada, condenada por un delito de lesiones agravadas, deberá indemnizar a la perjudicada con 23.000 euros y no ingresará en la cárcel si satisface 400 euros mensuales hasta cubrir esta cantidad. La víctima fue también condenada a su vez a una multa de 540 euros por agredir a su rival durante la pelea.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del 5 de marzo de 2016 en un pub del Marítimo. La principal acusada, de 35 años, no encontraba su bolso que había dejado en el local y fue a buscarlo al lugar donde se encontraba la víctima, rebuscando entre los abrigos de esta. Lo hizo varias veces hasta que la afectada y su acompañante le llamaron la atención, diciéndole que allí no estaba su bolso.

Comenzó ahí una discusión en la que las dos mujeres llegaron a las manos. Ambas se propinaron golpes hasta que una de ellas mordió en la mano a su rival. Le arrancó la falange distal de un dedo de la mano izquierda. La víctima sufrió además arañazos en la cara y el cuello y una contusión junto al ojo. La agresora, por su parte, padeció el arrancamiento de parte de las uñas acrílicas que llevaba, así como hematomas y contusiones en los brazos, las piernas y la cara.

La joven que perdió el dedo tuvo que ser sometida a una intervención quirúrgica, pero no pudieron reimplantarle el dedo. Estuvo un día hospitalizada y tardó más de tres meses en recuperarse. Además, ha precisado asistencia psicológica y padece secuelas.

La fiscalía pedía inicialmente tres años de prisión para la acusada de arrancar el dedo a su rival y 1.620 euros de multa para esta, ambas por delito de lesiones. Sin eembargo, estas penas fueron rebajadas al llegar a un acuerdo de conformidad el ministerio público y las defensas.

Las dos acusadas reconocieron los hechos durante el juicio que se celebró ayer en la Audiencia Provincial de Palma. La principal acusada aceptó finalmente una condena de dos años de prisión y pagar una indemnización de 23.060 euros para la perjudicada. La mujer no ingresará en la cárcel si abona 400 euros al mes a la afectada. La otra imputada, por su parte, aceptó pagar una multa de 540 euros e indemnizar a la otra condenada con otros 940.

Al tratarse de una conformidad en la que las dos partes admitieron los hechos, contra la sentencia no cabe recurso.