Una banda de ciudadanos rumanos fue juzgada ayer en Palma por cometer una oleada de hurtos en hoteles y paradas de autobús en Calvià entre 2016 y 2017. La fiscalía solicita para los cinco sospechosos, una mujer y cuatro hombres, uno de ellos en prisión, penas que suman 28 años y medio de cárcel. Todos ellos están acusados de pertenencia a grupo criminal y otro delito continuado de hurto. Además, dos encausados están imputados también por estafa. Los 'descuideros' presuntamente actuaban en grupo o en pareja y sustraían las carteras a los turistas en la recepción de los hoteles o bien en paradas de autobús. Las cámaras de vídeovigilancia de los establecimientos turísicos captaron alguno de los hurtos.

Tres de los sospechosos ayer se negaron a declarar en el juicio. Otro solo contestó a las preguntas de su abogado defensor y recalcó que él no había robado en ningún hotel de la isla y que tampoco formaba parte de una organización criminal dedicada a cometer hurtos. El hombre detalló que ni siquiera había estado en los establecimientos turísticos de Palmanova, Illetes y PalmanovaIlletesMagaluf. Según su versión, vino a Mallorca en marzo de 2017 para trabajar en el sector de la construcción y a mediados de abril se presentó voluntariamente ante los agentes.

El quinto acusado, que está preso, manifestó que no conocía al resto de encausados. También negó haber participado en los robos. "Nunca he estado con ellos. No he ido con ellos a ningún sitio", indicó. Según relató, empezó a residir en la isla a mediados de abril de 2016 porque aquí vivía su mujer. "Vine para estar con mi pareja y trabajar como relaciones públicas en el Paseo Marítimo", apuntó. El hombre recordó que en octubre de 2016 unos turistas sospecharon que él les había robado la cartera en una parada de bus, pero la Policía le cacheó y registró su coche y no hallaron nada. Por eso, le dejaron libre.

Dos víctimas extranjeras reconocieron ayer a dos de los acusados, a quienes culparon de haberles sustraído sus carteras. Una de las perjudicadas declaró que cuando iba a su habitación en el ascensor se percató de que le habían robado su monedero con 1.100 euros en un hotel de Magaluf. Otro cliente detalló que le sustrajeron la cartera con 75 euros y a una mujer otros 200 euros.