Una policía local de Palma que se hallaba fuera de servicio ha resultado herida leve esta madrugada tras ser embestida por un conductor ebrio en la Vía de Cintura. El sospechoso, que casi cuadruplicó la tasa máxima de alcohol permitida, circulaba de forma brusca con continuos cambios de carril, frenazos y acelerones.

La agente lesionado ha tenido que ser ingresada en un centro hospitalario, para observación médica, si bien las heridas que presentaba son de carácter leve, según ha confirmado la Policía Local de Palma.

Los hechos han tenido lugar hoy sobre las doce y veinte minutos de la madrugada cuando la policía se dirigía a su domicilio con su vehículo particular tras haber finalizado su servicio. Al circular por la Vía de Cintura, se percató de que el coche que le precedía realizaba una conducción totalmente anómala. El turismo cambiaba de carril de forma reiterada y daba frenazos y acelerones.

Por la experiencia profesional de la testigo, sospechó que el conductor pudiera hallarse bajo la influencia de bebidas alcohólicas. Por ello, ante el peligro que suponía para el resto de usuarios de la Vía de Cintura, la agente fuera de servicio llamó a la base del 092 informando de lo ocurrido y dando su posición y solicitó una unidad de apoyo.

Cuando el conductor ebrio iba a entrar en el túnel de la Vía Cintura que enlaza con la carretera de Manacor, efectuó un brusco frenazo y dio marcha atrás a una velocidad considerable, por lo que acabó chocando contra el vehículo de la policía local.

Poco después, acudió a la zona la Guardia Civil de Tráfico, que se hizo cargo del atestado. La primera prueba de alcoholemia practicada al conductor sospechoso arrojó un resultado positivo de 0,96 mg/l en aire expirado. El vigente Código Penal califica como delito una tasa superior a 0,60 mg/l y la tasa máxima permitida al volante es de 0,25 mg/l.