El profesor del colegio religioso San Alfonso María de Ligorio de Palma detenido esta semana por un caso de presuntos abusos sexuales a una menor ya mantuvo una relación sentimental con una alumna de 16 años, hermana de la primera, hace diez años. Un juzgado de Palma investigó al maestro por estos hechos en 2008 y finalmente la Audiencia Provincial archivó el caso al considerar que se trataba de sexo consentido entre la escolar y el docente

El sospechoso, de mediana edad, fue sacerdote y llegó a ejercer también como vicario de la parroquia de l'Encarnació de Palma y también como misionero en Perú, si bien hace unos quince años se secularizó. El pasado miércoles por la tarde fue conducido al juzgado y quedó en libertad sin medidas cautelares. El arrestado se acogió a su derecho a no declarar ante el magistrado de guardia de la ciudad. El hombre niega todos los cargos.

La orden de los religiosos Teatinos, que regenta el colegio San Alfonso María de Ligorio en el casco antiguo de Palma, despidió al maestro hace un mes después de que una exalumna del centro educativo que reside en el extranjero enviara un correo electrónico denunciando un caso de presuntos abusos. En esas fechas, había salido a la luz otro caso en la misma escuela que acabó con la detención de otro docente, de 60 años, por supuestos abusos sexuales a una quincena de alumnas de entre 14 y 17 años a las que presuntamente profería frases obscenas.

Tras el despido del docente, semanas más tarde, la víctima interpuso una denuncia contra él. La perjudicada, que ya es mayor de edad, relataba graves episodios de abusos sexuales ocurridos años atrás cuando era menor en un domicilio, en un ámbito más íntimo y no en el seno del colegio. Los agentes de la Unidad de Familia y Mujer (Ufam) de la Policía Nacional, tras tener constancia de estos hechos, procedieron a detener al excura el pasado miércoles. Ese mismo día, por la tarde, salió libre por orden del juez.

El maestro mantuvo una relación sentimental hace diez años con una alumna de 16 años, hermana de la ahora denunciante. En esa época, un juzgado de instrucción de Palma investigó al docente por presuntos abusos sexuales con introducción y prevalimiento y acordó el sobreseimiento libre de la causa. A finales de junio de 2008, la Audiencia de Palma confirmó el archivo del procedimiento al argumentar que el profesor, entonces de unos 40 años, y la escolar mantenían sexo consentido.

Según concluyó el tribunal, la menor fue quien "buscó, propició y quiso iniciar la relación afectiva con el acusado". La sala reconoció que existía "una innegable diferencia de edad" entre ambos y que el acusado se hallaba en una situación "de ascendencia" al ser el educador y ella la alumna, pero esto no fue aprovechado ni buscado por el hombre para seducir a la menor, según la Audiencia, sino que fue ella la que provocó el encuentro y relación con el acusado "y le confesó su amor y atracción".

El tribunal también admitió que la víctima se hallaba en una situación de debilidad e inferioridad emocional por haber sufrido abusos sexuales graves por parte de su padrastro desde los nueve años, pero esta situación no fue aprovechada por el maestro, quien, cuando se enteró de estos hechos, la acompañó al servicio de protección al menor para que lo denunciara. El docente luego siguió contactando con la adolescente, pese a que los técnicos lo desaconsejaron. La menor iba a su casa y ambos tenían encuentros sexuales. Ambos "se sentían física y emocionalmente atraídos y enamorados el uno del otro", recalca la Audiencia de Palma.