La Policía Nacional ha detenido en Palma a un joven de 27 años que golpeó a un hombre para robarle el coche y poco después destrozó la cristalera de un estanco para apoderarse de 155 cajetillas de tabaco. Los agentes detuvieron al sospechoso cuando se dirigía al vehículo sustraído y lograron recuperar el tabaco, informó ayer la Policía.

Los hechos ocurrieron el pasado domingo a medianoche, cuando una pareja se dirigía hacia su coche, estacionado en la zona de la Playa de Palma. De pronto, un individuo se abalanzó sobre el hombre y le propinó varios golpes para apoderarse de las llaves del automóvil. Acto seguido, escapó a bordo del vehículo.

Tres horas más tarde, el delincuente se dirigió a un estanco de la misma zona y, con la tapa de una alcantarilla que cogió de la calle, rompió la cristalera. Consiguió así entrar en el local y robar decenas de cajetillas de tabaco.

La Policía puso en marcha un operativo para localizar al delincuente. Esa misma noche, los agentes lo sorprendieron cuando iba a coger de nuevo el vehículo robado. Tenía escondidas las 155 cajetillas sustraídas en una sábana oculta detrás de un muro, cerca de dónde estaba el coche robado.

El hombre quedó detenido por delitos de robo con violencia y robo con fuerza en un establecimiento. El acusado fue trasladado a comisaría para ser interrogado.

La Policía Nacional no da el caso por cerrado y mantiene abierta la investigación, ya que los agentes sospechan que pudo haber otras personas implicadas en los robos.