"Ya habían venido otra vez a casa. En esta ocasión nos asaltaron en los exteriores del chalé, nos hicieron entrar y abrir la caja fuerte. Pero cuando descubrieron que no teníamos tanto dinero como deseaban nos empezaron a pegar". Es el testimonio a IB3 Televisión de Apol·lònia M, esposa del propietario de la casa de las afueras de Porreres que el sábado por la mañana sufrió un atraco con violencia que terminó en tragedia.

La Guardia Civil ha extendido a toda Mallorca el dispositivo de búsqueda y captura de la banda de atracadores, mientras el propietario de la finca, que disparó a bocajarro a uno de los delincuentes, se recupera de las heridos sufridas en el hospital de Manacor.

Pau R., de 77 años, exempleado de la Banca March y propietario de una empresa de máquinas tragaperras, tiene la nariz rota y numerosas contusiones en cara y piernas. Y se espera que a lo largo de esta tarde pueda regresar a Porreres tras recibir el alta, aunque no se instalará en su casa, sino en el domicilio de su hijo.

El miedo y el trauma por el episodio vivido todavía son muy poderosos. En todo caso se espera que en las próximos horas pueda declarar ante el juez para aclarar lo sucedido.

La Policía Judicial trabajó ayer hasta casi entrada la noche en la casa de Porreres asaltada, situada en una empinada bifurcación de la carretera a Montuïri, inmediatamente después del cementerio de Porreres, buscando pistas que permitan esclarecer los hechos y dar con el resto de los integrantes de la banda, que según la investigación se habrían dedicado hasta ahora ha perpetrar robos con violencia en diferentes domicilios del municipio de Llucmajor.