Una patrulla de la Guardia Civil interceptó en la madrugada del pasado miércoles en sa Pobla un coche con dos individuos que llevaban una mochila con numerosas herramientas para la apertura de puertas. Los agentes, ante la posibilidad de que se tratara de dos ladrones de domicilios, identificaron a los sospechosos y les intervinieron los utensilios, mientras se investiga si pudieran estar involucrados en algún delito cometido recientemente.

La patrulla de la Guardia Civil estaba realizando controles de vigilancia precisamente para evitar robos en sa Pobla, cuando los agentes se fijaron en un coche que circulaba por una de las calles de la localidad con dos ocupantes que les inspiraron sospechas.

Los guardias les dieron el alto y realizaron una inspección en el vehículo. Allí encontraron una mochila que parecía contener un equipo completo del material necesario para entrar a robar a una casa: varias ganzúas, un destornillador de impacto, una sierra de metal, dos linternas, unos prismáticos, un visor monóculo, un par de guantes , una navaja multiherramienta, otra navaja, un puño americano, una palanca de metal, dos cargadores de pistola y numerosos juegos de llaves.

Se trataba claramente de utensilios como los utilizados por los ladrones. Cuando los guardias preguntaron a los sospechosos para qué los iban a utilizar, no dieron ninguna respuesta lógica. Los guardias llegaron a la conclusión de que se disponían a perpetrar algún robo, pero no podían arrestarles porque no tenían ningún indicio de que hubieran cometido algún delito ya. Probablemente con su intervención evitaron que lo hicieran.

Los agentes optaron por tomar los datos de los dos sospechosos y del coche en el que circulaban, y se incautaron de la mochila.

Mientras tanto, se ha iniciado una investigación para ver si alguno de los objetos intervenidos hubiera sido sustraído o si hubiera sido empleado para cometer algún robo.