Un hombre de unos 40 años ha sido imputado por estrellar su coche contra el de su expareja en Palma. El acusado tenía en vigor una orden de alejamiento de la víctima, dictada en diciembre por un juzgado tras un presunto episodio de malos tratos. El turismo de la mujer sufrió cuantiosos daños, valorados en más de 400 euros. La Policía Local logró la grabación de la cámara de seguridad de un comercio que recogió toda la secuencia. El hombre ha sido citado a declarar como investigado por delitos de quebrantamiento de medida cautelar y daños intencionados.
Los hechos ocurrieron el pasado día 16. Una mujer residente en la zona de Son Malferit descubró que su vehículo, aparcado junto a su domicilio, había sido golpeado durante la noche. La afectada sospechó enseguida que los daños habían sido causados de forma intencionada por su expareja y acudió a la Policía Local para presentar una denuncia.
La mujer aportó un auto del juzgado de violencia sobre la mujer número 1 de Palma, dictado en diciembre, en el que se prohibe a su excompañero acercarse a menos de 400 metros de ella, su domicilio, su lugar de trabajo y los lugares que frecuenta. La víctima señaló que el acusado ha incumplido esta orden varias veces desde entonces.
La Policía Local puso en marcha una investigación. Los agentes comprobaron que junto al lugar de los hechos hay una cámara de seguridad de un comercio y solicitaron la grabación a la empresa de seguridad. Las imágenes de la noche anterior mostraban cómo un coche se acercaba al de la víctima, se detenía ante él y acto seguido chocaba varias veces. No había dudas de que era un acto intencionado. El conductor del turismo se apeó tras la colisión y, después de comprobar los daños, se marchó. Los destrozos superaban con creces los 400 euros.
Los investigadores lograron identificar al propietario del automóvil y lo citaron a declarar. El hombre explicó que él apenas utiliza el coche y que son su mujer y su hijo quienes suelen conducirlo. La Policía Local comprobó que el hijo era la expareja de la víctima. En la grabación se podía identificar al autor de los daños y, comparándolo con imágenes de las redes sociales del sospechoso, certificaron que era él.
El acusado, Pedro M.M., ha sido imputado por delitos de daños intencionados y quebrantamiento de medida cautelar. La Policía Local lo ha citado a declarar la semana que viene en calidad de investigado.
