La Audiencia Provincial de Valencia ha absuelto a un bombero mallorquín acusado de desviar entre 86.000 y 144.000 euros de la ONG que presidía para fines personales. El acusado, defendido por los letrados Llorenç Gomila, se enfrentaba a una petición de la fiscalía de tres años y medio de cárcel por administración desleal. La sentencia considera que el procesado llevó la contabilidad de la entidad de manera desordenada, pero no hay pruebas de que destinara fondos de la ONG para usos particulares. Un perito llegó afirmar en el juicio que incluso podría haber perdido dinero durante su etapa al frente de la asociación.

El hombre presidió Bomberos Sin Fronteras, con sede en Valencia, entre 2004 y 2006. Durante su mandato, traspasó fondos desde cuentas de la ONG a una particular, que utilizaba tanto para gastos personales como para los proyectos solidarios, según la sentencia. Una vez dejó la presidencia, los nuevos directivos le denunciaron tras no poder justificar los gastos de una iniciativa subvencionada por la Generalitat valenciana, que reclamaba la cantidad aportada.

El tribunal entiende que el bombero mallorquín realizó una gestión contable caótica y desordenada, pero considera que los proyectos de la ONG se llevaron a cabo y que no hay ninguna prueba de que utilizara los fondos de Bomberos Sin Fronteras en su propio beneficio, por lo que lo absuelve.