Un joven de 19 años será juzgado la semana que viene en Palma acusado de violar a una adolescente de 14 en la Comandancia de la Guardia Civil de Palma. El sospechoso y la víctima contactaron en la red social Instagram y se citaron en el domicilio de la menor para conocerse. Una vez allí, el hombre forzó a la menor a mantener relaciones sexuales completas. La fiscalía imputa al procesado un delito de abuso sexual y pide que indemnice a la víctima con 4.000 euros, así como una orden de alejamiento de siete años en favor de la perjudicada.

Los hechos ocurrieron hace poco más de un año, durante las vacaciones escolares navideñas. El acusado, de nacionalidad ecuatoriana, contactó a través de Instagram con una menor de 14 años. Según la fiscalía, aprovechó la ventaja que le daba tener cinco años más para engatusar a la adolescente. Consiguió así concertar una cita con ella para conocerse en persona.

El encuentro tuvo lugar en el domicilio de ella, en la Comandancia de la Guardia Civil de la calle Manuel Azaña, en la mañana del 5 de enero de 2017. Los padres de la adolescente no estaban allí. Los dos se dirigieron entonces a la habitación de la menor.

En el cuarto, el acusado, que acababa de cumplir 18 años, abusó de ella. Pese a la oposición de la víctima -"No quiero hacer nada fuera de lo normal, no quiero follar", le dijo-, logró mantener felaciones sexuales completas, siempre según el relato de la acusación. El caso fue denunciado y el sospechoso fue identificado, pero no llegó a ser detenido, recoge el escrito de conclusiones provisionales de la fiscalía.

El ministerio público considera que estos hechos constituyen un delito de abusos sexuales a menor de 16 años, por el que reclama nueve años de prisión para el joven imputado. Además, solicita que se le prohíba acercarse a menos de 500 metros de la víctima, su domicilio y cualquier lugar frecuentado por ella durante siete años.

Pide también el mismo tiempo de libertad vigilada para el procesado. Por los daños morales que le causó, la fiscalía entiende que debe abonar una indemnización de 4.000 euros para los padres de la adolescente.

Está previsto que el juicio por estos hechos se celebre el próximo lunes en la sección segunda de la Audiencia Provincial de Palma. La fiscalía ha pedido al tribunal que se garantice que la menor y el acusado no se verán durante la declaración de la víctima en la vista oral.

La acusación ha citado a declarar, además de al procesado, a los agentes que investigaron los hechos.