La fiscalía reclama una pena de siete años de prisión para un hombre de mediana edad por intentar matar a un joven de una puñalada tras discutir con él por un aparcamiento en el barrio de Nou Llevant en Palma a principios de junio de 2017.
El ministerio público acusa al presunto agresor, un ciudadano natural de Argentina, de un delito de homicidio en grado de tentativa. Además de la condena de siete años de cárcel, también solicita en concepto de responsabilidad civil una indemnización de 15.000 euros por las lesiones y secuelas causadas. La Audiencia de Palma tiene previsto celebrar una vista oral por este caso la próxima semana.
El afectado, de 23 años, resultó herido grave tras sufrir un navajazo en el abdomen en plena calle. La cuchillada le perforó el intestino y le provocó una lesión vascular, por lo que tuvo que ser trasladado al hospital, donde le intervinieron quirúrgicamente.
Los hechos ocurrieron el pasado 8 de junio de 2017, sobre las once de la mañana, cuando el sospechoso mantuvo una discusión con el joven por motivos de estacionamiento en la calle Ciutat de Querètaro, en la zona de Nou Llevant, en Palma. Los dos conductores se disputaron una plaza para aparcar su coche.
En el transcurso de la riña, el procesado sacó del interior de su vehículo una navaja y, con "intención de causar la muerte" al muchacho y con "pleno conocimiento de las consecuencias de su acción", según la fiscalía, procedió a clavársela en la zona abdominal.
Como consecuencia de estos hechos, el perjudicado sufrió una herida incisa con perforación intestinal y lesión vascular. Precisó asistencia médica, tratamiento quirúrgico y tardó en curar de las lesiones 60 días, siete de los cuales estuvo ingresado en el hospital.
Secuelas
El joven afectado padece como secuelas una cicatriz de 22 centímetros en la zona abdominal media y otra cicatriz en la fosa ilíaca derecha de siete centímetros. El forense valora en diez puntos el perjuicio estético.
Tras ser apuñalado en plena calle al mediodía, el muchacho corrió para ponerse a salvo hasta su domicilio, en la calle Valparaíso, a unos cien metros del lugar de la agresión. Sus familiares alertaron de inmediato a los servicios de emergencias. Varias patrullas de la brigada de Seguridad Ciudadana y la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) de la Policía Nacional se movilizaron de inmediato para capturar al agresor, mientras dos ambulancias del Ib-Salut acudían a la vivienda donde se encontraba la víctima.
Los agentes consiguieron localizar y detener en cuestión de minutos al supuesto autor de la agresión, que iba acompañado de otras dos personas. Los policías acordonaron la zona en la que habían ocurrido los hechos para llevar a cabo una inspección ocular y recabar pruebas.
Un día después, el arrestado ingresó en prisión por orden judicial. Admitió que discutió con el perjudicado por el estacionamiento y alegó que trató de defenderse y solo quiso asustar al muchacho porque este le estaba agrediendo. Según él, en ningún momento quiso hacerle daño con la pequeña navaja que llevaba.
