La Audiencia de Palma condenó ayer a penas que suman 18 años de prisión a siete acusados por traficar con drogas en el verano de 2015 en Magaluf. Los sospechosos, la mayoría españoles y uno de ellos británico, se declararon ayer por la mañana autores responsables de un delito contra la salud pública ante el tribunal de la sección primera.
El fiscal retiró la acusación contra otros cuatro implicados, tres de los cuales mujeres, por lo que la sala les absolvió 'in voce' de los delitos que se les imputaban en un principio.
El resto de encausados, siete hombres, todos ellos en libertad, aceptaron penas de entre tres años y medio de cárcel y un año y medio por traficar con estupefacientes, así como multas de 360 euros y 4.740 euros.
El sospechoso con la mayor condena, tres años y seis meses de prisión, cuenta con una sentencia anterior, por lo que se le apreció la circunstancia agravante de reincidencia. La sala también tuvo en cuenta la atenuante de toxifrenia, ya que en la fecha de los hechos el hombre tenía sus facultades alteradas por el consumo y adicción a las drogas, según la tesis del ministerio público.
Los siete sospechosos se dedicaban a la venta de cocaína y hachís en el verano de 2015 en Magaluf. Los encausados distribuían los estupefacientes entre los turistas de la zona y otros clientes habituales. Varios de ellos abastecían a otros sospechosos. La Guardia Civil registró diferentes domicilios en Magaluf y Palmanova a mediados de septiembre de 2015 y se incautó de pequeñas partidas de cocaína y cannabis, dinero en metálico y otros útiles.
