Bogdan K., el supuesto parricida de Costa d'en Blanes, es una persona conocida en círculos policiales en la isla. Los agentes le han detenido en los últimos años en al menos tres ocasiones por un robo violento en Magaluf, un caso de maltrato familiar y también por quebrantamiento de medida cautelar por presuntamente saltarse una orden de alejamiento de su madre, Elena. Ahora, se enfrenta a nuevos cargos que conllevan graves penas: un asesinato consumado y otro en grado de tentativa. Hoy está previsto que pase a disposición judicial.

La Policía Local de Calvià le arrestó en 2013, cuando contaba 23 años, por atracar a una persona en Magaluf. En esa ocasión, se le imputó un robo con violencia.

Dos años más tarde, en el verano de 2015, fue detenido de nuevo por un episodio de violencia doméstica en Calvià. Por estos hechos, un juzgado de Palma acordó la medida cautelar de alejamiento de su madre y de su padrastro. Esta prohibición de aproximarse al matrimonio y al domicilio familiar en Costa d'en Blanes se extinguió meses más tarde, ya a principios de 2016. Un juzgado palmesano abrió un procedimiento que se tramitó como un delito leve de amenazas. Como denunciantes figuraban su madre Elena K. y su padrastro, ahora asesinado, Pere Antoni Serra Crespí. El caso acabó en una absolución.

La Policía Nacional también le detuvo el 12 de mayo de 2016 en la oficina de Extranjería de Palma al comprobar que estaba reclamado por saltarse la antigua orden de alejamiento de su madre.