Una mujer y sus dos sobrinos, todos de origen rumano, han sido detenidos en Palma por trata de seres humanos para su explotación sexual tras liberar a una joven rumana que era obligada a ejercer la prostitución en cautiverio, según la Policía Nacional. Los tres arrestados quedaron en libertad por orden judicial el jueves.

La muchacha había llegado a Mallorca desde sus país engañada por los detenidos con la falsa promesa de un futuro laboral en España. Una vez en la isla, le fue retirada la documentación y el teléfono para que no pudiera comunicarse con sus familiares o amigos, y fue obligada a prostituirse en al menos dos pisos de Palma, y haciéndole creer que si se lo decía, la Policía no la creería.

Esta chica fue explotada sexualmente durante los dos meses que duró su cautiverio. En un descuido de sus tratantes, la víctima consiguió escapar del domicilio donde estaba cautiva y salió a la calle donde tras pedir dinero a viandantes subió a un autobús de línea hasta el centro de Palma.