Ocho ovejas murieron ayer al ser arrolladas por un coche en la carretera de s'Aranjassa, en Palma. El vehículo sufrió cuantiosos daños, pero sus ocupantes resultaron ilesos. Los animales fallecidos formaban parte de un rebaño de unos 50 ejemplares que se escaparon de una finca cercana y deambulaban por la zona. Hacia las seis de la tarde, un conductor se topó con ellas y no pudo evitar atropellarlas, informaron fuentes policiales.