La Policía Nacional inició ayer una investigación para aclarar las circunstancias de la muerte de un hombre de 43 años, cuyo cadáver fue descubierto a primeras horas de la mañana de ayer en plena calle en Palma. Los agentes concluyeron que el ciudadano, que es un funcionario de la prisión de la ciudad, falleció al precipitarse al vacío desde su domicilio en la calle Ramon Muntaner. Los investigadores descartaron también la participación de terceras personas en los hechos.

El perjudicado, vecino de la zona, presentaba un fuerte golpe en la cabeza. Su cuerpo fue descubierto en plena calle, bajo un coche en la vía pública. Los agentes apuntaron como hipótesis inicial que el hombre se había precipitado al vacío desde su vivienda, ya que vivía en un segundo piso justo encima de donde fue encontrado el cadáver. Así pues, la muerte se produjo por una caída por precipitación, si bien habrá que esperar a los resultados de la autopsia que previsiblemente se le practicará hoy.

Los hechos fueron descubiertos ayer aproximadamente a las seis y media de la mañana cuando un transeúnte alertó de que había un cadáver en la calle Ramon Muntaner, en Palma.

Inmediatamente, se movilizaron las patrullas de la Policía Nacional, Policía Local de Palma y los servicios sanitarios del 061. El equipo médico confirmó que el hombre ya había fallecido.

El óbito fue comunicado al juzgado de instrucción número 4 de Palma, en funciones de guardia, que abrió diligencias. Luego, acudió a la zona un médico forense que examinó el cuerpo sin vida del vecino, antes de proceder al levantamiento del cadáver. La calle quedó cortada al tráfico. Los agentes identificaron al fallecido como un funcionario de la cárcel de Palma.