Stephen Paddock, el hombre que causó 59 muertos y más de 500 heridos con sus disparos del domingo por la noche en Las Vegas, poseía un total de 42 armas de fuego entre su casa de Mesquite, a unos 130 kilómetros del lugar de los hechos, y la habitación del hotel donde se hospedaba.

Las autoridades encontraron 23 de esas armas en la habitación del hotel desde donde Paddock disparó a discreción a las 22.000 personas que asistían a un concierto al aire libre de un festival de música country, según informó Todd Fasulo, ayudante del sheriff del condado de Clark, al que pertenece Las Vegas.

Otras 19 armas de fuego aparecieron en su residencia de Mesquite, pequeña ciudad del estado de Nevada, donde también se encuentra Las Vegas.

Paddock, según Fasulo, poseía también dos dispositivos que, colocados en la culata de sus armas semiautomáticas, le permitieron abrir fuego de forma completamente automática.

Además, la policía encontró en el coche del atacante varios kilos de nitrato de amonio, un material empleado para la fabricación de explosivos.

El tirador, de 64 años, pasó sus últimos momentos disparando frenéticamente contra la policía a través de la puerta de su habitación en el hotel Mandalay Bay, según el sheriff del condado de Clark, Joseph Lombardo.

Paddock disparó a un guardia de seguridad y abrió fuego contra un equipo de la unidad de elite SWAT, formado por seis agentes que fueron revisando el hotel piso a piso.

"Creemos que el individuo se quitó la vida antes de que entráramos a la habitación", sostuvo Lombardo.

Sin vínculos terroristas

Lombardo dejó que fuera un portavoz del FBI el que diera los detalles de la investigación y explicara que se descarta cualquier vínculo del tirador con algún grupo terrorista extranjero. Horas antes, el grupo yihadista Estado Islámico (EI) se había atribuido la matanza al asegurar, a través de su agencia de propaganda afín, Amaq, que el autor del atentado era "un soldado del Estado Islámico".

Lombardo explicó que las autoridades no tenían información previa sobre el sospechoso, por lo que respondió a los periodistas: "No sé cómo esto podría haberse prevenido".

Una de las revelaciones de su comparecencia fue que el atacante rompió las ventanas del hotel con una herramienta similar a un martillo antes de disparar indiscriminadamente contra la multitud.

La Policía ha concluido que Paddock introdujo él solo, sin colaboradores, las armas que se encontraron en su habitación del hotel, donde se alojaba desde el 28 de septiembre.

Lombardo confirmó que han hablado con la pareja del atacante, Marilou Danley, de 62 años, que se encuentra en estos momentos fuera del país. Aunque se sigue considerando que ella es una "persona de interés" en este suceso, los agentes creen que no tuvo nada que ver con la masacre.

La alcaldesa de Las Vegas, la demócrata Carolyn Goodman, manifestó también en rueda de prensa que el tiroteo es obra de un "lunático loco lleno de odio" y pidió a la población que acuda a los bancos de donación de sangre porque "ahora mismo es lo más necesario".