Warren Lytlle, el británico acusado de estrangular a su pareja con un cable en Calvià, ha aceptado una condena de 12 años de prisión y reconocido el crimen ante un jurado popular.

El procesado, acusado inicialmente de asesinato y que se enfrentaba a 20 años de cárcel, ha acatado la pena por homicidio con la atenuante de confesión y la agravante de parentesco tras un acuerdo entre su letrado, Gaspar Oliver, la fiscalía, la acusación particular y la abogacía de la comunidad autónoma. El pacto, sin embargo, deberá ser ratificado tras el veredicto del jurado.

El hombre, de 52 años, ha admitido durante el juicio en la Audiencia Provincial que acabó con la vida de su mujer, Lisa Jane Lyttle, en la madrugada del 23 de enero de 2016. Ambos se encontraban en su apartamento, en Costa de la Calma. Según su versión, habían bebido y se enzarzaron en una discusión por motivos económicos. Durante la pelea, rodeó el cuello de la víctima con el cable de un teléfono móvil y la estranguló. El procesado ha asegurado que llamó tanto al 112 como a muchos contactos de su agenda para explicar lo ocurrido. "No ha pasado un solo día en el que no me haya arrepentido", ha dicho.

La hija de la pareja, por su parte, ha relatado varios episodios violentos sufridos por su madre a manos de su padre antes del crimen. La mujer había denunciado al acusado en Reino Unido por malos tratos. La joven reclama una indemnización por la muerte de su madre.