La fiscalía solicita un total de 44 años de prisión para Gabriel A.G., alias El Ove, y seis familiares, integrantes del clan de Los BizcosLos Bizcos, por blanquear las ingentes ganacias que presuntamente obtenían con la venta de droga en Son Banya con la compra de pisos, fincas rústicas, embarcaciones y coches. El fiscal ha detectado que en una de las transacciones, la compra de una finca en el término de Palma, el precio escriturado fue de 36.000 euros, cuando realmente pagaron 336.000 euros, abonados en su mayor parte en billetes de 20 euros.
Los acusados son Gabriel A.G. y seis de sus familiares. La mayoría de ellos han sido condenados por delitos contra la salud pública, al integrar un clan familiar que se dedicaba a la venta de estupefacientes en el poblado de Son Banya conocido como Los Bizcos.
De acuerdo con las conclusiones del fiscal, los acusados, de forma directa o indirecta, adquirieron bienes muebles e inmuebles para invertir las grandes ganancias que obtenían con la venta de estupefacientes. De esta manera " introdujeron en el circuito financiero de comercio legal importanes cantidades de dinero procedentes de la venta de la actividad ilícita".
Para ello, prosigue el escrito de acusación, "compraban al contado propiedades inmobiliarias haciendo constar en las escrituras públicas un precio inferior al real, abonaban la totalidad del precio oculto en metálico (...), realizaban mejoras en los inmuebles y compraban diversos bienes de consumo, manteniendo un nivel de vida superior al que correspondía a sus ingresos".
La fiscalía aporta una sucesión de transacciones atribuidas a los miembros del clan, entre las que destaca la compra de varias fincas rústicas de Palma y Marratxí.
El fiscal considera a los acusados responsables de delitos de blanqueo de dinero, así como de un delito conta la Hacienda Pública. Para El Ove solicita una pena de 10 años de prisión, cinco de sus familiares se enfrentan a sendas penas de seis años de cárcel y la última procesada, a cuatro años. También pide que se impongan multas de varios millones de euros a los acusados.
