La banda de narcotraficantes británicos de Magaluf desarticulada anteayer por la Guardia Civil introducía en Mallorca grandes partidas de droga escondidas en barcos de recreo. Los 14 detenidos en la 'Operación Tatum' formaban, según la investigación del instituto armado, la mayor red de distribuidores de droga de la zona de Punta Ballena. Los cabecillas contaban con una amplia red de vendedores que ofrecían cocaína, metanfetamina y hachís a los jóvenes turistas en sus noches de fiesta. Los sospechosos permanecían ayer en dependencias policiales y estaba previsto que hoy fueran puestos a disposición del juzgado de guardia de Palma.

Los más de tres kilos y medio de cocaína incautados anteayer, durante la redada llevada a cabo por los agentes del Equipo contra el Crimen Organizado (ECO) y la Policía Judicial de Algaida, evidencia el nivel de actividad de la banda. Esta red, investigada desde hace meses, había tomado el relevo de un grupo de narcos desarticulado el pasado verano, en otra gran operación en Magaluf que permitió intervenir casi cinco kilos de cocaína y arrestar a cinco personas.

Los ahora detenidos habían logrado hacerse con buena parte del negocio del narcotráfico en la zona. La introducción de la droga, principalmente cocaína, se llevaba a cabo mediante embarcaciones de recreo privadas, que pasaban desapercibidas entre los miles de barcos que navegan por las costas de Mallorca en los meses de verano.

Una vez en la isla, los estupefacientes eran almacenados en pisos francos, tanto en Calvià como en Palma, y llevados a Magaluf prácticamente a diario en cantidades menores para satisfacer la demanda de los turistas. Las sustancias eran distribuidas mayoritariamente en Punta Ballena gracias a una importante red de vendedores, algunos de los cuales aprovechaban su trabajo como tiqueteros en las puertas de locales de ocio para ofrecerlas a los jóvenes extranjeros.

La Guardia Civil, tras meses de investigaciones y seguimientos, decidió poner fin a la actividad de este entramado el pasado jueves. A primera hora de la mañana, los agentes encargados de las pesquisas, con el apoyo de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia (Usecic), irrumpieron en una docena de domicilios en Palma y Calvià y arrestaron a 14 personas, casi todas de nacionalidad británica, por su presunta pertenencia a la organización de traficantes.

A lo largo de la mañana, los investigadores inspeccionaron a fondo los inmuebles en busca de drogas y dinero. La 'Operación Tatum' acabó convirtiéndose en uno de las redadas antidroga más exitosas de los últimos años. Los agentes consiguieron incautarse de unos tres kilos y medio de cocaína, 500 gramos de metanfetamina, cantidades menores de hachís y unos 123.000 euros en efectivo, fruto según se sospecha de la venta de drogas en Magaluf.

Buena parte del alijo de cocaína decomisado fue localizado en un coche estacionado en el garaje de un bloque de viviendas en Palma. Al parecer, estaba allí escondido a la espera de que fuera necesario llevarlo a Punta Ballena para abastecer a los vendedores.

Los 14 detenidos en la operación antidroga permanecían ayer en dependencias de la Guardia Civil. Los investigadores tenían previsto tomarles declaración a lo largo de la jornada, para ponerlos hoy por la mañana a disposición del juzgado de instrucción número 2 de Palma. Están acusados de varios delitos, entre ellos contra la salud pública y organización criminal.

La agentes encargados del caso consideran desarticulada la banda tras el mazazo asestado el jueves, pero no dan por cerrada la operación ni descartan que puedan producirse más detenciones en los próximos días. La Guardia Civil expondrá hoy las drogas y el dinero intervenidos.