Un insoportable olor agudizado por las elevadas temperaturas hizo que los vecinos de un inmueble de La Soledat, en Palma, alertaran ayer por la mañana a los servicios de emergencia. Pese a las reiteradas llamadas al timbre de los residentes, nadie les abría la puerta. Una dotación de Bombers de Palma se desplazó hasta el lugar para acceder al interior y los peores presagios se cumplieron. En el interior se han encontrado el cadáver de un anciano de 88 años, que llevaba ya varios días muerto. El cuerpo no presentaba señales de violencia y todo apunta a que el hombre murió por causas naturales.

Agentes de la Policía Local también se desplazaron hasta la vivienda, situada en la calle Antoni Rosselló i Nadal de La Soledat. Al parecer, el hombre había fallecido hacía varios días y con su hijo no se pudo contactar, debido a que se encontraba de vacaciones.

Efectivos del Cuerpo Nacional de Policía también acudieron al domicilio donde había sido encontrado el cuerpo. Los agentes comunicaron el fallecimiento al juzgado de instrucción número 2 de Palma y el juez ordenó el levantamiento del cadáver. El forense que examinó el cuerpo no encontró en la víctima señales externas de violencia y los primeros indicios apuntan a que el óbito se pudo producir por causas naturales hace al menos cuatro días. El cadáver fue trasladado por empleados de la empresa funeraria municipal al Instituto de Medicina Legal, donde estaba previsto que se le practique la autopsia para certificar la causa del fallecimiento.

Caída accidental

Por otra parte, los investigadores de la Policía Nacional han confirmado que la anciana cuyo cadáver fue hallado el martes por la tarde en un rellano de su edificio en Palma falleció al sufrir una caída accidental. Al parecer, la víctima caminaba por las escaleras comunitarias de la finca, en la calle Sant Agustí, cuando perdió el equilibrio y cayó. Recibió un fuerte golpe en la cabeza que le causó un traumatismo craneal y una gran hemorragia.