Tres empresarios y ocho empleados han sido detenidos en Palma por un fraude a la Seguridad Social de unos 67.000 euros y un delito de falsedad documental, indicó la Policía Nacional. La investigación arrancó en mayo a raíz de información facilitada a la Policía Nacional por la Inspección de Trabajo y Seguridad Social sobre una empresa de construcción con sede en Palma que tenía a varias personas contratadas sin que realizaran ningún trabajo real.

La Unidad contra Redes de Inmigración(UCRIF) de la Brigada Provincial de Extranjería y Documentación de la Jefatura Superior de Baleares, identificó al dueño de la empresa y al gestor de la misma. Estos, con el fin de defraudar a Hacienda y tener ingresos extras, habían puesto a un testaferro como responsable de la empresa, eludiendo así el pago de las cuotas de la Seguridad Social, que asciende a 67.867,97 euros. Los dos empresarios detenidos dieron de alta en la empresa a ocho ciudadanos extranjeros, todos ellos detenidos, a los que cobraban una cuota que iba de 600 a 1.000 euros. A su vez estos trabajadores se podían beneficiar de las prestaciones y subsidios públicos, logrando 18.000 euros.