Los falsos príncipes de Hohenlohe Hohenlohe serán juzgados por una supuesta estafa piramidal de casi 8 millones de euros cometida en Mallorca. El juez Enrique Morell ha dado por concluida la instrucción y decretado la apertura de juicio oral contra la pareja, para quienes una treintena de afectados reclaman hasta 20 años de prisión por delitos de estafa, apropiación indebida, administración desleal, insolvencia punible, asociación ilícita, falsedad documental y falsedad en la cuentas societarias. El magistrado da a los acusados diez días para que depositen una fianza de 10,4 millones de euros para hacer frente a las posibles multas e indemnizaciones que se les impongan.

Jürgen Ludwig H., austriaco de 57 años, y su pareja, la española Beatriz B.D., de 42, fueron detenidos por la Policía en marzo de 2012 y pasaron nueve meses en prisión preventiva por una gran estafa piramidal cometida durante los tres años anteriores. Según la investigación, habrían captado en la isla a unos 200 inversores -la mayoría alemanes, británicos y españoles- a los que prometían beneficios anuales de entre el 15 y el 48 por ciento. A través de dos sociedades, recibieron supuestamente unos 8 millones de euros que gestionaron como una estructura piramidal hasta que esta resultó inviable.

El hombre utilizaba un titulo de príncipe de Hohenlohe falso, según las pesquisas, que habría utilizado para aparentar una solvencia que en realidad no tenía. Ambos disfrutaban de un elevado nivel de vida, acudían a exclusivas fiestas y tenían en sus oficinas fotografías de los entonces príncipes de Asturias, Zapatero, Rajoy y otras personalidades.

La fiscalía decidió el año pasado no acusar a la pareja, al entender que no habían cometido ningún delito y que simplemente actuaron como intermediarios entre inversores y personas que buscaban financiación a cambio de una comisión. El ministerio público emplazó a los denunciantes a reclamar sus pérdidas por la vía civil.

El proceso penal, sin embargo, siguió adelante y 31 acusaciones particulares se personaron en la causa. El titular del juzgado de instrucción número 2 de Palma, que ha investigado el caso, ha dictado esta semana el auto de apertura de juicio oral y remite la causa a la Audiencia Provincial, ya que las acusaciones reclaman penas de hasta 10 años de prisión para cada uno de los dos acusados. El juez advierte a la pareja que sus bienes serán embargados si no depositan una fianza de 10,4 millones de euros en diez días.