Once personas han sido detenidas en Mallorca por tráfico de drogas en una operación conjunta desarrollada por la Policía Nacional, Guardia Civil y Vigilancia Aduanera en la que se han incautado de 2,5 kilos de cocaína, unas 500 plantas de marihuana, diez kilos de sustancia de corte y más de 2.000 euros, según informó ayer la Benemérita.

En el transcurso de la operación denominada "Río Negro" contra esta banda dedicada principalmente al tráfico de cocaína, también se le encontró en posesión de un revólver municionado en perfecto estado de funcionamiento.

La investigación arrancó hace siete meses cuando se detectaron en el puerto de Palma dos vehículos procedentes de la península, que trasladaban ocultos en su interior seis paquetes de cocaína, que fueron interceptados con la ayuda de los guías caninos de ambos cuerpos policiales.

En los ocho registros domiciliarios realizados, algunos en locales, se intervino la sustancia de corte para la manipulación de la sustancia estupefaciente, dinero, básculas de precisión y un revólver con munición en perfecto estado de funcionamiento.

La organización estaba integrada por personas españolas y otras originarias de varios países sudamericanos, que introducía la cocaína en Mallorca con vehículos preparados para ocultar los alijos de droga.

Una vez recibida, la droga era manipulada para su venta entre los distintos clanes del poblado Son Banya, desde el que se distribuía por toda la isla de forma diaria, según apuntaron ayer fuentes policiales.

La operación policial es fruto de las pesquisas conjuntas entre los agentes de Guardia Civil, Policía Nacional y Aduanas.