El fiscal pide una pena de ocho años de prisión para un hombre acusado de un presunto delito de corrupción de menores por descargar y distribuir, supuestamente, vídeos de pornografía infantil a través del programa Ares. El encausado se sentará el próximo jueves en el banquillo de la Sección Primera de la Audiencia Provincia de Palma.

De acuerdo con el escrito de acusación del Ministerio Público, el procesado llevaba descargándose de internet en su ordenador estos archivos de contenido pedófilo "al menos desde octubre de 2014". También los distribuía (peer to peer) en la red a través del programa Ares.

Las investigaciones iniciadas por expertos del Grupo de Delitos Telemáticos de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil detectó la existencia de numerosos usuarios de internet que se dedicaban a compartir archivos de vídeo de contenido de pornografía infantil.

Después de hacer la preceptiva criba y los descartes de posibles descargas accidentales, los especialistas del Instituto Armado repararon en un dirección IP de un ordenador, domiciliado en Palma, con un muy activo tráfico de estos archivos de pornografía infantil.

Como consecuencia de estas pesquisas, el 12 de abril de 2016 efectivos de la Unidad de Policía Judicial de la Guardia Civil de Balears, con el mandamiento judicial de entrada y registro domiciliario, irrumpieron en la vivienda del sospechoso, situada en la calle Joaquim Sorolla de Palma.

Los investigadores localizaron en la vivienda un ordenador que tenía instalado el programa Ares desde el que se habían intercambiado los archivos P2P de pornografía infantil.

Asimismo, los efectivos del Instituto Armado examinaron minuciosamente otros dispositivos de almacenamiento informático que pudieran contener estos vídeos pedófilos.

Búsqueda encubierta

En un análisis científico y pericial se pudieron recuperar, total o parcialmente, decenas de carpetas y subcarpetas con cientos de archivos de vídeo de contenido pornográfico infantil. De hecho, en el momento mismo del registro se estaban descargando en el ordenador diecisiete archivos pedófilos.

En algunas de estas búsquedas utilizaba siglas en inglés que encubrían el verdadero contenido pedófilo de estos archivos. Utilizaba términos como pthc ( preteen hardcore) u opva ( onion pedo video archive). Las expresiones 5yo, 12yo o daddy escondían relaciones incestuosas. No obstante, en otros casos era mucho más explícito y trataba de localizar estos vídeos con palabras como "abuso sexual" o "violación".

Los vídeos de pornografía infantil que descargaba y distribuía eran "especialmente duros, degradantes y vejatorios", explica el fiscal en su escrito. Los archivos reflejaban a menores de muy corta edad que eran sometidos a todo tipo de abusos.

Así, el fiscal considera que la descarga y distribución de estos archivos constituyen un presunto delito de corrupción de menores por los que solicita ocho años de prisión para el procesado.