La juez de Vigilancia Penitenciaria número 2 de Alicante ha propuesto, de acuerdo con los informes psiquiátricos, que Noelia de Mingo, la médico que en 2003 mató a tres personas en la Fundación Jiménez Díaz, salga del Hospital Psiquiátrico y pase a un tratamiento ambulatorio con custodia familiar.

La juez ha elevado esa propuesta a la Audiencia de Madrid, tribunal que la condenó a 25 años de internamiento psiquiátrico, y que ahora tiene que resolver sobre esa propuesta del centro, que cuenta con el visto bueno del fiscal siempre que tenga control médico y familiar.

De Mingo fue condenada en 2006 por matar a tres personas y herir a otras siete en la Fundación Jiménez Díaz de Madrid en 2003, pero se consideró probado que padecía "esquizofrenia tipo paranoide con delirios de persecución y alucinaciones que afectaba a todo tipo de relaciones sociales y laborales y en pleno brote violento".

Una enajenación mental por la que fue ingresada en el Hospital Psiquiátrico Penitenciario de Fontcalent, cuyos forenses han ido haciendo informes semestrales sobre su estado que la dirección del centro remite al juzgado de vigilancia penitenciaria.

Uno de ellos, al que tenido acceso Efe, supone un cambio fundamental en la valoración de De Mingo, pues plantea que la esquizofrenia paranoide que sufre está "estabilizada" y "en remisión total" desde que comenzó el tratamiento.

El informe detalla que la mujer disfrutó de dos permisos (de 15 y 30 días) en Madrid, que es plenamente consciente de su enfermedad y acepta que necesita el tratamiento, que no ha sufrido recaídas en diez años, que no consume alcohol ni sustancias tóxicas y que ha mejorado su capacidad de comunicación y su "resonancia afectiva".

Por ello, los forenses del psiquiátrico proponen la sustitución de la medida de internamiento por el tratamiento ambulatorio con custodia familiar.

La juez también ha recibido el informe de la trabajadora social favorable a ese cambio de tratamiento, el compromiso de la familia de Noelia de que resida con ellos y bajo su supervisión y el informe del psiquiatra que llevaría su tratamiento si se aceptase su salida.

Y un último informe forense, de abril de este año, del Instituto de Medicina Legal de Alicante, dependiente de la Consellería de Salud valenciana, que también respalda el cambio de tratamiento, "siempre que se cumplan una serie de requisitos, como son buen apoyo familiar y control por parte de su unidad de salud mental de referencia, donde sigan su evolución y se le dicten sus pautas de tratamiento, y su situación clínica no se modifique".

El fiscal apoyó la medida del tratamiento ambulatorio, pero objetó que debe ir acompañada "de custodia familiar" por parte de la madre de Noelia "garantizándose así un doble control médico y familiar".

Los informes ponen de manifiesto que De Mingo ha seguido estudiando por la UNED, ha aprendido inglés, portugués y valenciano (quiere dedicarse a ello profesionalmente), ha hecho el Camino de Santiago con otros internos, ha escrito una serie de relatos que quiere publicar.

Ahora debe ser la Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Madrid la que decida, pero previamente ha remitido el expediente a la Fiscalía y a las acusaciones particulares, y éstas aún no se han pronunciado al respecto.

Una de ellas la ejercen los abogados del Defensor del Paciente, que se oponen a ese cambio por "la enorme peligrosidad que supone, que ni el Forense ni los terapeutas del centro psiquiátrico penitenciario tendrán que soportar".