Un hombre de 59 años, identificado como J.B.R., falleció ayer por la mañana al parecer a causa de una enfermedad fulminante que le hizo sufrir un accidente de tráfico en la carretera de Porto Cristo a Son Servera. Los indicidos recogidos por la Guardia Civil de Tráfico apuntan a que el hombre pudo sufrir un desvanecimiento, que provocó que perdiera el control de su coche, cruzar el carril contrario y colisionar contra un muro. Cuando llegaron al lugar las dotaciones de emergencia le encontraron en muy mal estado, y aunque le realizaron las maniobras de reanimación, el hombre falleció allí mismo.

El accidente ocurrió ayer a las siete de la mañana, a la altura del kilómetro 5 de la carretera de Porto Cristo a Son Servera. El hombre, vecino de la zona, se dirigía a un centro de salud porque se encontraba mal. Durante el trayecto perdió el control del coche y se estrelló contra un muro.

Los primeros en llegar al lugar fueron agentes de la Policía Local de Sant Llorenç, que encontraron al ocupante del coche ya en muy mal estado. Los policías realizaron las prácticas de reanimación cardiopulmonar hasta la llegada de una ambulancia del 061. La dotación sanitaria prosiguió con estos intentos, pero fue en vano, y el hombre falleció allí mismo.

Al lugar se desplazaron también dotaciones de la Guardia Civil de Tráfico, que se encargaron de investigar las circunstancias del siniestro. Según comprobaron los agentes, el Seat Ibiza en el que viajaba el fallecido había cruzado al carril contrario, rozó con otro vehículo y finalmente se estrelló contra una pared.

Sin embargo, tanto los agentes como los sanitarios del 061 coincidían en que el impacto no había sido tan fuerte como para causarle la muerte. La hipótesis que consideraban más probable es que el conductor hubiera sufrido algún ataque fulminante, que le habría hecho perder el conocimiento, por lo que sufrió el accidente, y le causó la muerte.