La Guardia Civil ha identificado el cadáver hallado el domingo en s'Avenc de Son Pou como Alejandro Segura, un hombre de 64 años, vecino de Santa Maria, cuya desaparición se denunció el pasado mes de enero. Los investigadores no hallaron signos de violencia en el cuerpo, si bien se estaba a la espera de la autopsia para determinar las causas de la muerte.

El cuerpo sin vida de Alejandro Segura fue descubierto el pasado domingo por unos excursionistas en el interior de s'Avenc Son Pou, una conocida cueva en el término municipal de Santa Maria. El cadáver estaba en avanzado estado de descomposición, lo que apuntó desde un inicio que podía haber fallecido hace varios meses.

Al lugar acudieron dotaciones de los Bombers de Mallorca y de la Guardia Civil, que realizaron la primera inspección del lugar y trasladaron el cuerpo hasta el lugar donde pudo llegar el vehículo de los servicios funerarios, que a su vez lo llevó al Instituto Anatómico Forense, donde estaba previsto que se le practicara la autopsia.

Las primeras investigaciones permitieron identificar el cuerpo como Alejandro Segura, vecino de Santa Maria. Su desaparición había sido denunciada por un familiar en la Jefatura de la Policía, en Palma, el pasado 17 de enero. En aquel momento las búsquedas que se hicieron no condujeron a ningún resultado.

El cadáver hallado el domingo no tenía señales de violencia evidentes. El fallecido iba vestido con ropa de invierno, lo que apunta a que la muerte se produjo en fechas cercanas a la de la denuncia de la desaparición.