La Policía Nacional detuvo anteayer en Palma a un hombre de 41 años por amenazar con un hacha a su exjefe, al que reclamaba 300 euros por un trabajo. Ambos se enzarzaron en una pelea a puñetazos porque la víctima no podía pagarle toda la deuda, tras lo que el acusado fue a su domicilio, regresó con el arma e intimidó a su rival. Al percatarse de la presencia policial lanzó el hacha a un contenedor y, en presencia de los agentes, golpeó de nuevo al perjudicado.

Los hechos ocurrieron hacia las ocho de la tarde del lunes en un bar de la calle Sant Ignasi, en La Soledad. Los dos hombres se citaron para saldar la deuda, pero el empresario solo pudo ofrecerle 100 euros. Su exempleado montó en cólera, exigiéndole todo el dinero y empezó a mostrarse agresivo. Ambos se intercambiaron varios golpes.

El acusado se marchó del lugar pero regresó cinco minutos después con un hacha y se acercó a su rival. La Policía, que ya estaba alertada de la pelea anterior, lo sorprendió. El sospechoso arrojó entonces el arma a un contenedor, se abalanzó sobre la víctima y le dio dos puñetazos en la cara antes de ser reducido y detenido. Está acusado de un delito de amenazas y ayer por la tarde fue puesto a disposición del juzgado de guardia.