Un turista holandés de 25 años fue juzgado ayer por mostrar los genitales y simular que se masturbaba ante dos niñas, una de tres años y medio y otra de 18 meses, en s'Arenal. El acusado supuestamente reaccionó así cuando varios familiares de las pequeñas le increparon por orinar en la playa, a pocos metros de donde se encontraban. La fiscalía reclama una pena de nueve meses de prisión para el procesado por un delito de exhibicionismo. El joven no acudió a la vista oral y en la causa está imputado un compatriota y amigo suyo, que está declarado en rebeldía.

Los hechos ocurrieron hacia las nueve de la noche del 22 de julio de 2014. El padre de las dos menores explicó ayer durante el juicio que habían ido a pasar un día de playa en familia al balneario 4, en la Playa de Palma. De pronto, aparecieron dos chicos que empezaron a orinar entre unas hamacas y unas sombrillas, a unos cinco metros de donde se encontraban ellos, según declaró el denunciante.

"Mi madre les llamó la atención y ellos nos mostraron los genitales, haciendo gestos obscenos y simulando que se masturbaban", explicó. "Las niñas vieron lo que ocurría. La mayor estuvo haciendo preguntas durante bastante tiempo", contó. El hombre recordó que siguió a los dos turistas y alertó a una patrulla de Policía Local que pasaba por la zona, cuyos agentes los identificaron.

Uno de los policías señaló que varios testigos les contaron que los jóvenes habían seguido realizando gestos obscenos mientras corrían por el murete que separa la arena del paseo.

La fiscal Rosario García reclamó al concluir la vista una pena de nueve meses de cárcel para el turista holandés, mientras la defensa reclamó su absolución al entender que no actuó con intención libidinosa ni sexual.