La presidenta del Colegio de Enfermería de Balears (Coiba), Rosa María Hernández, pidió ayer, tras la muerte la semana pasada de una mujer que se sometió a una operación de liposucción en una clínica privada de Palma, que la Administración lleve a cabo "más inspecciones" y animó a los usuarios y afectados a que realicen denuncias pues "los colegios profesionales no pueden actuar de oficio".

Hernández recordó que, como informó ayer Diario de Mallorca, han presentado una querella contra esta clínica que se ha admitido a trámite por presunto intrusismo laboral, ya que personal sin formación estaría llevando a cabo tareas propias de enfermería, como poner inyecciones.

Según señaló, desde el Coiba se informó en octubre a la Dirección General de Inspección de Trabajo y Seguridad Social del ministerio pero este departamento del Gobierno se archivó la causa al considerar que"los hechos recogidos no suponen una infracción del orden social". De esta manera, Hernández destacó la necesidad de que los afectados pongan denuncias ante el colegio "si se sospecha de intrusismo" pero también reclamó ayuda mediante el fomento de las inspecciones para minimizar los casos de intrusismo.