Una grúa de grandes dimensiones ha retirado el lujoso yate de 34 metros de eslora que quedó completamente destrozado hace una semana tras el violento temporal que azotó el Port d´Andratx. La suntuosa embarcación, valorada en varios millones de euros, fue arrastrada por las fuertes rachas de viento y empotrada posteriormente contra el hormigón. Los cuantiosos daños habían dejado el barco irrecuperable y fue izado camino del desguace. Además, un catamarán se hundió al golpearse contra el pantalán y un velero quedó destrozado al lanzarle contra las rocas.