Un grupo de niños, alevines del Club de fútbol Santa Catalina, encontraron ayer una gran cantidad de huesos humanos mientras jugaban en un descampado de Son Flo, en Palma. La Policía acordonó la zona, al constatar que allí había numerosos restos óseos de personas.

El macabro hallazgo se efectuó sobre las cuatro de la tarde. Un grupo de padres con sus hijos hacían una torrada en la zona. De repente, varios chicos echaron a correr por el descampado. El terreno había sido removido recientemente.

Cuando los menores regresaron al lugar donde se encontraban sus progenitores, portaban un fémur, una tibia y un maxilar sin pensar que podría tratarse de restos humanos. José Luis Flores, odontólogo en el centro de salud de Son Rul·lan, no albergó la menor duda de la procedencia de los huesos.

"Cuando vi el maxilar, me di cuenta sin ningún género de dudas de que se trataba de restos óseos humanos", abundó el facultativo. A continuación, un grupo de padres acompañó a los niños hacia el lugar donde los habían encontrado. Los progenitores, muchos de ellos médicos, se quedaron estupefactos ante la gran cantidad de huesos de personas que había allí diseminados.

"En ese momento lo que hice fue avisar a la Policía para que vinieron. Los niños se llevaron un susto tremendo cuando les dijimos que eran restos humanos", indicó Flores.

Despliegue policial

Un nutrido despliegue policial movilizó en torno al descampado de Son Flo. En un primer momento, se personaron agentes de la Policía Local de Palma. Instantes después acudieron al lugar efectivos de la Policía Nacional.

El ingente volumen de huesos encontrados causó cierto desconcierto en torno a las medidas que acometer. Las primeras hipótesis apuntaban a que podrían estar enterreados desde hacía bastante tiempo. Sin embargo, el terreno había sido removido en los últimos días y favoreció que los restos óseos salieran a al superficie.

El odontólogo que certificó en primera instancia que se trataba de restos de personas también los dató de urgencia. Las primeras estimaciones es que podrían llevar largo tiempo enterrados. "Podrían corresponder perfectamente a la Guerra Civil", precisó.

Muchos padres ejercieron de guías para que los policías se adentraran en el descampado y localizaran las osamentas humanas que habían salido a la superficie. Mientras sus hijos lo habían convertido en un juego. Los funcionarios, por su parte, comunicaron el hallazgo al Juzgado de Instrucción número 12 de Palma, ayer en funciones de guardia, para que el juez ordenara la recogida de los restos humanos.