Varios vecinos de un edificio de Son Gotleu, en Palma, sofocaron ayer un incendio declarado en un piso de la finca habitado por 'okupas'. Los moradores habían salido de la vivienda dejando una olla al fuego, lo que generó una gran humareda que empezó a extenderse por la finca. El resto de inquilinos, tras alertar a los servicios de emergencias, decidieron derribar la puerta del inmueble para sofocar las llamas antes de que llegaran los bomberos. La Policía Local encontró además en la vivienda siniestrada al menos un pitbull cuya documentación al parecer no estaba en regla y seis plantas de marihuana.

Los hechos ocurrieron hacia las once de la mañana en un edificio situado en el número 57 de la calle Santa Florentina, junto a la plaza Fra Joan Alcina. Una densa humareda negra comenzó a salir de una vivienda de la quinta planta, en la que reside una familia de 'okupas' que en ese momento no estaban dentro.

Los vecinos de la finca no tardaron en descubrir el humo y alertaron a los servicios de emergencias. Pero antes de que llegaran los bomberos, varios de ellos decidieron irrumpir en el piso. Echaron la puerta abajo y se adentraron en el inmueble para tratar de sofocar las llamas.

Así, descubrieron que el origen del incendio era una olla sobre los fogones encendidos de la cocina. Los moradores la habían dejado en el fuego y se marcharon de la vivienda. Los testigos lograron sofocar las llamas, extendidas a los muebles cercanos.

Dotaciones de los Bombers de Palma y patrullas de la Unitat de Seguretat Integral (Usei) y la Unitat d'Intervenció Immediata (UII) de la Policía Local llegaron entonces al lugar. Los bomberos comprobaron que el incendio estaba ya controlado y ventilaron el piso, donde se había acumulado una gran cantidad de humo que causó daños en varias estancias.

Algunos moradores del edificio salieron a la calle cuando se declaró el incendio, aunque los servicios de emergencias no tuvieron que desalojar la finca. Tampoco hubo que lamentar daños personales.

Los 'okupas' que residen en el edificio fueron localizados poco tiempo después. En el inmueble se encontraron seis plantas de marihuana y al menos un perro de raza pitbull, considerada potencialmente peligrosa. La Policía Local requirió la documentación del animal a los moradores para comprobar si estaba en regla. Según parece, carecían de los permisos necesarios para tener este tipo de perro.

La Policía Local de Palma elaboró un informe sobre lo ocurrido que será remitido al juzgado para determinar si las personas que residen en el inmueble donde se declaró el incendio han cometido algún tipo de infracción penal, según explicaron fuentes policiales.