Los sindicatos policiales ASP, SUP y UFP, han presentado una denuncia ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social por las obras de reacondicionamiento que se han llevado a cabo en la Sala del 091 de la Jefatura Superior de Policía de Palma durante este fin de semana.

Durante la realización de las mismas, consistentes en la demolición de una pared y falso techo, los funcionarios policiales que prestan servicio no han sido reubicados en otra dependencia, por lo que han tenido realizar su labor con una gran cantidad de escombros y polvo en suspensión, con el riesgo que conlleva el derribo de un muro y un falso techo a una distancia inferior a 20 centímetros de la mesa de trabajo.

En el escrito denuncian que los responsables de la Jefatura no han informado a los delegados de Prevención de Riesgos Laborales del plan de ejecución de la obras, de la empresa que ejecuta las mismas, así como de los riesgos que conllevan, como así recoge la normativa vigente en materia de Prevención de riesgos Laborales.

Los representantes sindicales critican que no se haya tomado ni la más mínima medida de seguridad durante el derribo, habiendo quedado expuestos los policías a un eventual riesgo en caso de desprendimiento del falso techo.

Según la denuncia, "lo más increíble de la situación es que el inspector de Trabajo ha decidido no paralizar las obras hasta que se subsanaren estas irregularidades. Por lo que a día de hoy siguen las labores de adecuación de la Sala del 091, mientras los Policías siguen ahí atendiendo las llamadas de emergencia de los ciudadanos, a pesar de los peligros y de no contar con ningún tipo de equipo de protección".

Los sindicatos destacan que se ha retirado el techo de encima de los operadores de sala, que hay cables cortados con corriente junto a los puestos de trabajo, cableado por el suelo, y los albañiles trabajan a escasa distancia de los policías de servicio.