La Audiencia de Palma ha confirmado una condena de ocho años de prisión para un joven extranjero por robar el bolso por el procedimiento del tirón a una octogenaria, a la que arrojó contra el suelo y causó graves heridas, y también a una menor en el portal de su casa en el verano de 2016. El tribunal ha ratificado íntegramente la sentencia dictada por el juzgado de lo penal número 4 de Palma, que impuso al acusado cuatro años de cárcel por un delito de robo con violencia, dos años más por lesiones y otros dos por un segundo robo con violencia. Además, fue sentenciado también a una multa por un delito leve de hurto intentado.

El asaltante, de 27 años, se encuentra en situación irregular en España. En la actualidad está preso y cuenta con un expediente de expulsión incoado que no se puede materializar al no constar cuál es su país de origen.

El sospechoso, que utiliza hasta cuatro nombres distintos, actuó el pasado 26 de junio de 2016, sobre las doce y media del mediodía, cuando una mujer de 83 años caminaba por la calle Gabriel Carbonell de Palma. El muchacho le propinó un fuerte empujón por detrás, le arrebató el bolso en el que llevaba 60 euros y la arrojó al suelo. La víctima sufrió policontusiones con herida inciso contusa en el labio, fractura de la rótula izquierda y desperfectos en la prótesis dentaria que portaba. Tardó en curar de la lesiones 70 días y le han quedado secuelas tras el asalto. El 'tironero' tendrá que indemnizarla con más de 5.000 euros.

Días antes, sobre las seis de la mañana del 11 de junio de 2016, el asaltante se aproximó a una adolescente de 16 años cuando esta estaba abriendo el portal de su casa, situada en la calle San Rafael, en Palma, y le dio un fuerte tirón. Así, consiguió apoderarse de su bolso que contenía un teléfono móvil, unos cascos y maquillaje.

Por último, el acusado, a las cinco de la tarde del 12 de julio de 2016, fue sorprendido por un vigilante de seguridad de un centro comercial de las Avenidas cuando escondía en su pantalón varios polos de vestir valorados en 277 euros a los que había arrancado las alarmas. Las prendas quedaron inservibles para su venta a terceros. Ese día fue detenido y desde esas fechas permanece encarcelado. El joven cuenta con antecedentes penales al haber sido condenado en dos ocasiones anteriores por delitos de lesiones.